La australiana incursionará por primera vez en el Top-10 del ranking WTA
Sobre el papel, Ashleigh Barty tenía pocas opciones ante Petra Kvitova. Antes del partido de cuartos de final en el WTA Mandatory de Miami, la checa registraba cinco victorias en igual número de enfrentamientos, por lo cual, todo iba viento en popa. Kvitova empezó de la mejor manera, pues quebró en el quinto game del primer set, la oceánica recuperó su saque y en el tie-break tomó la delantera. El segundo parcial quedó en poder de Kvitova, pero en el tercero Barty impuso condiciones y se quedó con la victoria por 7-6(8), 3-6 y 6-2.
Ese resultado le permitió quitarse la maternidad de la checa e incursionar por primera vez en su carrera en el Top-10 del ranking mundial, pues pase lo que pase, a partir del próximo lunes será como mínimo nueve del mundo. “Lo más importante para mí era arrebatarle el servicio a Petra. Ella tiene un servicio de clase mundial”, fueron sus palabras al ser consultada por la principal clave del triunfo.
Barty expresó lo que significa para ella el ingresar al Top-10. “Es muy bueno. Es un objetivo que nos fijamos a principios de año y ha sido uno de mis objetivos desde hace mucho tiempo. Es increíble que haya podido lograrlo. He trabajo duro en los últimos meses, sea lo que sea, para tratar de mejorar un poco y tratar de marcar la diferencia. Es sorprendente lo que sucede cuando pones tus esperanzas y sueños en el universo y haces el trabajo”.
La australiana es consciente de lo que quiere, y no se conforma con lo hecho. “Todavía hay un largo camino por recorrer, y no estoy satisfecha. Tengo hambre de mejorar como persona y como jugadora”. Finalmente, habló de su próxima oponente, la estonia Anett Kontaveit. “No hemos jugado en mucho tiempo. Ha hecho méritos para llegar Acá. Con mi equipo de trabajo elaboraremos un plan de juego, y saldré a ejecutarlo”.
Redacción Match Tenis
