La N°1 del mundo ofreció su perspectiva sobre lo que para ella significa el tenis.
La posición de Ashleigh Barty en el planeta tenis es tan envidiable como desafiante. Ocupar la cima del escalafón mundial femenino exige una capacidad de adaptación a múltiples factores, incluida la presión natural de ser la mejor tenista del planeta.
Pero aún así cada persona, y en este caso, cada jugadora, es un universo distinto que percibe de forma particular el papel que cumple como deportista de élite. Justamente, la australiana se refirió a este tema tras su debut en el WTA 1000 de Cincinnati.
«Mi trabajo consiste en golpear una pelota y hacer que caiga dentro de las líneas que delimitan el campo de juego. Sin embargo no lo veo como un trabajo, también percibo el hecho de ser tenista como un privilegio y una responsabilidad. Así es como me gano la vida y sé que siempre debo dar el máximo, juegue donde juegue, porque hay gente que paga una entrada para verme».
Para la vigente campeona de Wimbledon, lo más importante es ser promover que los protagonistas de este deporte sean transparentes. «A lo largo de mi carrera he procurado jugar de la manera más auténtica posible. Todos tenemos personalidades diferentes y entendemos la vida y el tenis de forma única, y creo que es importante plasmarlo en la pista», explicó.
En el cierre de su conferencia, Barty narró la llamativa forma en que percibe el entorno del planeta tenis. «Veo el tenis como una especie de circo ambulante. Para mi es una gran familia viajera que recorre el mundo con la responsabilidad de hacer que la gente disfrute«.
«En esa familia confluyen personalidades de todo tipo, de múltiples culturas y la manera en que convivimos es impresionante. Somos un deporte de gran impacto a nivel global».
[author image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/1122365846247096320/gFoXr9nB_400x400.jpg»] Marcelo Becerra Concha (@Marcelob11) Disfruto conociendo el mundo del deporte desde adentro. Bogotá.[/author]