La sensación de la gira de arcilla entregó sus sensaciones al clasificar a su primera final de Grand Slam.
Barbora Krejcikova quiere culminar con trofeo su sensacional temporada de arcilla. Un crecimiento fenomenal es el que ha demostrado en las últimas semanas donde consiguió título en Estrasburgo y ahora una final en Roland Garros, una instancia impensada para una jugadora que su carrera ha demostrado una mejor trayectoria en dobles que en sencillos.
Fue una victoria emocionante para la tenista checa que salvó un match point cuando Maria Sakkari sacó para partido en el tercer set, y tuvo que sellar la victoria más allá del tradicional 6-6 que en cualquier otro torneo hubiera desembocado en un tiebreak, pero Roland Garros aún mantiene la magia de los sets decisivos que se definen con dos games de diferencia.
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Para Krejcikova fue un partido donde cualquiera de las dos pudo haber ganado: «Creo que ambas merecíamos ganar porque jugamos un partido realmente genial; pero solo una podía ganar. Estoy muy feliz de haber sido yo, de que voy a tener otra oportunidad de jugar otro partido».
Que sea su primera final de Grand Slam es una situación emocionante, y eso lo tiene claro: «Siempre quise jugar partidos como este, siempre quise jugar torneos como este, grandes torneos con grandes oponentes, últimas rondas. Siempre fue algo que quise lograr. Me tomó algo de tiempo, pero creo que ahora mismo es el momento adecuado«.
A pesar de eso, reconoce que nunca se esperó haber llegado hasta el último partido donde tendrá como rival a la rusa Anastasia Pavlyuchenkova. «Realmente lo voy a disfrutar porque nunca esperé llegar tan lejos durante este torneo. Simplemente me divertiré y disfrutaré y pelearé hasta el final».
Redacción Match Tenis.