En el WTA 1000 de Montreal, la canadiense de 18 años Victoria Mboko protagonizó una de las historias más emocionantes del tenis reciente al vencer a la cuatro veces campeona de Grand Slams Naomi Osaka por 2–6, 6–4, 6–1 y conquistar su primer título WTA 1000. La joven, que llegó al torneo como invitada especial y número 85 del mundo, completó un recorrido de ensueño ante varias campeonas de Grand Slam, escalando hasta el top 25 del ranking mundial.
Sin embargo, el momento de gloria local tuvo un matiz inesperado. Durante la ceremonia de premiación, Osaka no felicitó a Mboko en su discurso como subcampeona, lo que generó críticas inmediatas en redes sociales y medios especializados.
Minutos después, en la zona mixta de prensa, la japonesa reconoció su error y explicó la situación: “Sí, definitivamente… esta mañana estaba muy agradecida. No sé por qué mis emociones cambiaron tan rápido, pero estoy muy feliz de haber jugado la final. Creo que Victoria jugó muy bien. Completamente me olvidé de felicitarla en la pista. Sí, quiero decir, lo hizo increíble.”
Lejos de alimentar la polémica, Mboko mostró madurez y empatía en sus declaraciones posteriores: “No tuve realmente la oportunidad de hablar con ella después del partido, pero estaba muy envuelta en todo lo que estaba pasando. Si eso fue lo que ella quería, también lo respeto. Sigo pensando que Naomi es una jugadora increíble y sigue siendo una chica muy agradable. Todavía la admiro. Nada cambia después del partido. Estoy muy feliz de haber ganado hoy, pero jugar contra ella también fue un momento realmente especial para mí.”
