El serbio avanzó los octavos de final de Roland Garros, tras imponerse sobre el español Roberto Bautista Agut con parciales de 6-4, 6-7(6), 7-6(4) y 6-1, luego de tres horas y 48 minutos de partido.
El último año de Novak Djokovic estuvo plagado de dificultades; sin embargo, en su llegada a París, el tenista balcánico parece estar dejando atrás todos los obstáculos que se le han atravesado en el camino. Las dudas que hasta hace poco amenazaban con alejarlo de la élite son cada vez más inofensivas para él. Así lo demostró este viernes ante el durísimo Bautista Agut, quien batalló y lo obligó a sacar lo mejor de su repertorio para avanzar por 9º año consecutivo al grupo de los 16 mejores en la capital francesa. “Jugar como lo hice en el cuarto set, después de tres horas de juego, es algo que me da mucha confianza”, comentó ‘Nole’, visiblemente satisfecho por su victoria.
“Es posible intentar controlar las emociones para evitar perder el foco, pero no creo que puedan controlarse en absoluto. Si alguien puede hacerlo, me gustaría conocerlo”, expresó el ex Nº1 del mundo. Y es que en un duelo con la intensidad y la paridad que se exhibió durante casi cuatro horas, la precisión y la cabeza fueron determinantes. Djokovic pegó en los momentos clave y no perdió el foco cuando Bautista Agut revirtió los momentos en los que parecía que el de Belgrado controlaba las acciones, como en el comienzo de la segunda manga, cuando desperdició una ventaja de 3 a 0 tras haberse quedado con el set inicial.
Al igual que en sus últimas ruedas de prensa, el campeón de Roland Garros en 2016 valoró el crecimiento que ha experimentado en las semanas más recientes. “Se aprende más de una derrota que de una victoria. Siempre. Porque miras hacia adentro y tratas de mejorar”
En su próxima salida, el serbio se medirá ante el también español Fernando Verdasco, que en su partido de tercera ronda derrotó a Grigor Dimitrov 7-6(4), 6-2 y 6-4.
Redacción Match Tenis
