A tan solo siete meses de colgar la raqueta, el Claro Open Colsanitas de Bogotá le dio a Francesca Schiavone un bálsamo para emprender el sprint final de una carrera laureada que seguramente la dejará en un lugar privilegiado en la historia de este deporte.
Francesca Schiavone se convirtió en la primera italiana en ganar un Grand Slam en Roland Garros 2010, con un plus incluido, obtener el título con el segundo mejor registro de la historia. Sin embargo, ese pasado brillante que la llevó a ocupar el puesto número 4 del mundo, estuvo alejado de su realidad antes de llegar al WTA de Bogotá, torneo que decidió darle una invitación al cuadro principal, con el fin de honrar tan honorifica trayectoria.
«Quiero darle gracias a la organización del torneo por haberme entregado un Wild Card», comentó con una sonrisa la italiana, tras conseguir su mayor alegría de los últimos años. «Cuando llegué a Bogotá tenía la ilusión de ganar el título pero nunca pensé que lo lograría». Añadió, «Estoy trabajando muy fuerte y cuando te esfuerzas algo viene detrás de todo eso».
Durante la semana en Bogotá, la italiana no perdió ningún set en su camino al título y derrotó a cuatro jugadoras ubicadas en el top 90 de la WTA, entre la que se destaca Kiki Bertenes, número 20 del mundo y reciente semifinalista de Roland Garros. «No fue fácil jugar en la altura porque la bola vuela mucho pero realmente tuve una gran semana. Pude convivir con dolores y malos partidos pero en momentos importantes estuve fuerte mentalmente y eso me ayudó a lograr mi objetivo», recalcó la tenista que llegó a Bogotá en el puesto 168 del mundo, y que incluso tuvo tiempo hasta para bromear. «Estoy como Serena Williams cuando gana un Grand Slam sin perder un set».
Tras ganar el octavo título de su carrera (primero en catorce meses) y volver a sentirse una tenista competitiva, Schiavone destacó dos claves: «La tierra me hace bien y me gusta jugar en esta superficie». La otra, el ambiente. «Mucha gente me apoyó durante la semana y eso fue muy importante porque me mantuvo viva y animada», referenció la campeona de la vigésima edición del Claro Open Colsanitas, que también se le vinieron a la cabeza memorias de París. «Cuando levanté el trofeo me vinieron recuerdos a mi cabeza de mi título en Roland Garros y causó una gran emoción», finalizó.
Con esta alegría resumida en meses de entrenamiento fuerte y pasión a la profesión, la jugadora que está próxima a cumplir 37 años se ubicó en el puesto 104º del mundo y con la clara posibilidad de disputar su Roland Garros 17º de manera consecutiva. Bogotá devolvió a la italiana la ilusión de permanecer jugando al tenis. «No pienso en retirarme y solo quiero disfrutar cada momento», y ella lo seguirá haciendo hasta que decida poner fin a su historia como tenista, que por el momento tiene fecha de caducidad en noviembre del 2017.
[author image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/853628771626340353/1bmEkJa7.jpg» ]ANDRÉS VARGAS PERAZA: @andresvarperaza. Periodista especializado en tenis. Exjugador de tenis con puntuación ITF. Miro el deporte desde una perspectiva diferente. Estuve en el lugar del deportista, ahora del periodista. Director y editor del portal www.matchtenis.com.[/author]