La canadiense habló de sus vivencias y dejó una valiosa reflexión.
Transcurrían los últimos meses de 2019 cuando Bianca Andreescu dio un enorme salto de calidad. Con apenas 19 años, la canadiense conquistó el US Open de aquella temporada y experimentó un cambio abrupto para su carrera deportiva y para su vida en general, algo lógico tras obtener un logro de la magnitud de un Grand Slam.
Pero que haya sido algo lógico no significa que haya resultado fácil de afrontar para la nacida en Mississauga, quien desde entonces ha tenido que batallar contra la presión de estar en la élite del tenis femenino y, por si fuera poco, contra múltiples lesiones que han minado su confianza y su salud mental.
Justamente, en una charla con el medio Daily Hive, Andreescu se refirió a la importancia de profundizar sobre esta problemática que en los últimos meses ha estado ante los ojos del deporte mundial.
«Ser deportista de élite no es nada fácil. Yo también experimenté lo que está viviendo Naomi -por Osaka- y me parece muy importante que el mundo se esté abriendo ante este tema, porque considero que aún no se habla lo suficiente», sostuvo.
¿Cómo ha manejado la canadiense esta problemática? «Durante los últimos años he aprendido a conocerme mejor, saber cuál es el propósito de mi vida y qué es lo que amo, y eso ha sido muy valioso». Y agregó: «Por fortuna, aprendí a hacerlo a una edad muy temprana y estoy agradecida por eso».
Para cerrar, la actual N°5 del mundo aprovechó para enviarles un mensaje a los jóvenes que recién dan sus primeros pasos en el planeta tenis. «Deben saber que algún punto encontrarán su camino. Pero deben confiar en ustedes y en sus capacidades. Para mi, una de las cosas más importantes es rodearse de buena gente que ame el deporte, que los apoye y quiera lo mejor para ustedes«.
[author image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/1122365846247096320/gFoXr9nB_400x400.jpg»] Marcelo Becerra Concha (@Marcelob11) Disfruto conociendo el mundo del deporte desde adentro. Bogotá.[/author]