El letón es hijo del magnate petrolero Ainars Gulbis, y se cree que, en su familia, por lo menos las próximas tres generaciones no tendrá que preocuparse por dinero
Son muchos los jugadores que cada día luchan para mantenerse entre los mejores del planeta tenis. Algunos lo logran, otros la suerte les ayuda y acceden a la élite del tenis, pero no se mantienen. Este es el caso de Ernests Gulbis, un millonario que puede comprar todo lo que se le apetezca, pero los resultados en el deporte blanco no.
Actualmente, Gulbis se encuentra disputando su 48 Grand Slam como profesional. Es la primera vez en su carrera que logra dos triunfos en el Australia Open, algo que en otros torneos ya era familiar. Actualmente está ubicado en el puesto 256 del ranking, por esta razón, comenzó su participación en el primer ´major´ desde la fase de clasificación.
Nos devolvemos en el tiempo hasta el 2014, exactamente al segundo grande de la temporada, Roland Garros. Ernest iniciaba su participación en París sin muchas expectativas, porque su registro en torneos de esta magnitud no era bueno. Fueron dos semanas donde nadie quería perderse un partido del letón por su gran nivel, hasta el punto en que logró clasificarse a la ronda de los 4 mejores en el torneo de tierra batida.
Desde ese punto, todo parecía que iba a mejorar, comenzó a escalar en el ranking ATP, hasta que un 9 de junio del 2014, el diestro logró ubicarse como el décimo mejor jugador del mundo. El planeta tenis ya lo veía favorito en cada torneo que disputaba. Este mismo año ganó su quinto y sexto título como tenista pro. Terminó la temporada en la posición 13, y se esperaba que en el 2015 fuera un año aún mejor para el.
Inicio como preclasificado en el primer Grand Slam de la temporada, pero fue sorprendido por el local, Thanasi Kokkinakis en la primera ronda. Llegó a Roland Garros, donde defendía 720 puntos. Pasó la primera prueba al vencer a Igor Sijsling. En segunda ronda se vería las caras con Nicolas Mahut, que en ese momento estaba ubicado en el puesto 116. Inicio el partido, pero no se veía al mismo Gulbis del año pasado. Al final cayó en cuatro sets y la suerte le comenzó a cambiar al europeo.
Desde aquel 2015, hasta este momento, las temporadas del nacido en Riga, Letonia, han sido de mal en peor. En el 2017, salió del top 400 y tuvo que comenzar a jugar de nuevo torneos Challenger porque con ese ranking no alcanzaba a entrar ni a las qualys de los ATP 250. En el 2018, todo indicaba que comenzaría a alzar vuelo puesto que llegó a una final ATP después de cuatro años, además, llegó a la cuarta ronda en Wimbledon, algo que nunca había logrado en Londres.
En el 2019, disputó 29 torneos y tan solo consiguió 6 victorias, un registro poco alentador. En este 2020, tan solo ha disputado un Challenger y fue superado en la ronda de octavos de final. Por un cupo a la cuarta ronda, el residente en Jurmala, Letonia enfrentará a Gael Monfils. El historial entre los dos está a favor del francés por 2-0.
[author image=»https://twitter.com/LopezJuans» ]Juan Sebastián López (@LopezJuans) Periodista especializado en tenis. Ex jugador de tenis. U. Javeriana. Analizó el tenis desde adentro y afuera de la cancha [/author]
