Roger Federer accedió a los cuartos de final del Masters 1000 de Shanghái después de apear a Roberto Bautista en tres mangas (6-3 2-6 6-4). El helvético, que se le notó con falta de ritmo competitivo en su primer duelo en suelo chino ante Daniil Medvedev, volvió a mostrar dudas en un partido en el que el vigente campeón tuvo que luchar contra una buena versión del tenista castellonense.
Fue en el octavo encuentro ente ambos cuando Bautista le pudo arrancar un set a Federer. El jugador español, que en 2016 (SF) sacó a Djokovic en el mismo escenario, poco pudo hacer en una buena primera manga del suizo que terminó por decantarse su lado una vez pudo romper en el 2-1. Federer colocó rápidamente el 4-1 a su favor y remó para adjudicarse el primer acto.
Llevaban sin verse las caras desde los cuartos de final del Masters 1000 de Canadá del pasado año. Allí el suizo le endosó un doble 6-4. Hoy el cemento de Shanghái descubrió a la mejor versión de Bautista en el segundo set.
El español se creció y comenzó a restar absolutamente todo. A eso se unió el desacierto de Federer al servicio. El helvético se desconectó en esa faceta y lo pagó caro. Hizo break en el juego inicial pero perdió la ventaja en el siguiente. Las sensaciones no eran buenas. Acabaría el acto con un 0% de puntos ganados con segundo servicio. Volvían las dudas.
Se notaba en su gesto. Estaba incómodo; frío -como el día en Shanghái- y, con ello, los miles de fans del primer cabeza de serie en el cuadro que se mostraban nerviosos en la grada. La derecha de Federer también temblaba. Tenía agujero. Perdía el ritmo que atenaza cuando él se monta en la bola. Había precipitación. Faltaba confianza. Incluso estiraba el cuerpo al descanso del 3-4 en el último set como si los músculos estuvieran agarrotados y no le permitieran golpear con la fluidez idónea.
Al otro lado, las sensaciones eran opuestas. Bautista se mostraba seguro de sí mismo en cada uno de sus golpes. El español corría de lado a lado soltando latigazos que mermaban la actitud del ex número uno. En el noveno juego se resolvió la contienda. Federer consiguió quebrar en el momento oportuno y cerró el partido, acto seguido, con su saque. Estaba en cuartos; respiraba, después de haber vuelto a sufrir.
«Él estuvo genial, todo le funcionó bien. Probé diferentes cosas, de nuevo, como ayer y funcionó», comentó el suizo en el micrófono, a pie de pista, instantes después de salir indemne del choque. Sobre su siguiente oponente, Kei Nishikori (d. Querrey 7-6, 6-4) dijo que: «Estoy muy feliz de ver a Kei de nuevo en este nivel. Va a ser un gran partido».
[author image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/947115456313389056/6XbxWQhc_400x400.jpg» ]DAVID SÁNCHEZ: @DASanchez__. Periodista especializado en tenis. Autor del libro ‘Sentir el tenis’ (Editorial Libros.com). Voleador nato en la red 2.0 y un jugador regular desde fondo histórico. Ágil y con capacidad de adaptación a todo tipo de superficies textuales. Español pero cosmopolita gráfico. He publicado en medios como CNN Chile, Sphera Sports, SportYou o El HuffPost y colaborado con emisoras radiofónicas como Radio MARCA, esRadio, RNE o Radio Internacional.[/author]
