Mauricio Hadad, único jugador colombiano en la historia del tenis en ganar un título ATP en individuales masculino (Bahamas -1995), y actual capitán de Copa Davis del equipo nacional, no ha logrado su principal objetivo: llevar a Colombia al grupo mundial. A raíz de eso, surge una pregunta en el entorno tenístico: ¿debería seguir dirigiendo a Colombia?
El extenista llegó al elenco tricolor en febrero de 2013 para consumar un anhelo: «es un sueño cumplido dirigir el equipo de Copa Davis de mi país, porque más allá del dinero está el honor». Tres años y medio más tarde, los números del entrenador no lo avalan: ganó tres series a equipos de menor envergadura (Uruguay-2013, República Dominicana-2014 y Uruguay-2015) y siempre falló en el momento justo, perdiendo tres ‘Play Offs’ (Japón-2013, Canadá-2014, Japón-2015) y la serie del pasado fin de semana por la final del grupo I de la zona americana ante Chile.
«Las oportunidades se acaban», expresa Andres Vargas, director de matchtenis.com. «Mauricio tuvo la suya y lastimosamente no la aprovechó. Debe irse. Es cierto que todo no es culpa de él, porque él directamente no juega los puntos, pero sí he observado una falta de autoridad en momentos decisivos del equipo. Por ejemplo, en 2015 no fue capaz de acompañar a Alejandro Falla a poner la cara ante todo un país después de haber perdido el quinto punto ante Japón. Y esta vez, dejó claro que Santiago Giraldo no tomó en cuenta su posición de seguir jugando a pesar de las condiciones y renunció al encuentro».
«Para la Federación Hadad sigue siendo la mejor opción, y tal vez pueda ser así, pero las derrotas no lo avalan», escribe Andrés Botero, periodista deportivo, que sigue semana a semana el deporte blanco. «Sin embargo, creo que él, por orgullo propio dejará el cargo. Es hora de hacer un recambio y me inclinaría por Mario Rincón, no por nada fue el entrenador por muchos años de la Universidad de la Florida».
Finalmente, Antonio Casale, gran conocedor y crítico del tenis, a lo largo de su extensa carrera, añadió: «Hadad cuenta con los requisitos para ser capitán de Copa Davis, pero es evidente que aunque tiene autoridad, no tiene poder. La decisión tomada por Giraldo deja ver que en lo deportivo el que manda no es él (Hadad). En consecuencia creo que uno de los dos está sobrando en estos momentos. O le dan el poder a Giraldo para que haga las veces de jugador o capitán o Mauricio demuestra que es el jefe. Eso incluye no convocar a Santiago al equipo por un buen tiempo. ¿Lo dejarán hacerlo?, concluye el columnista de El Espectador.
Por ahora el vallecaucano continúa al frente del Equipo Nacional y tiene un gran respaldo de la diligencia del tenis colombiano para que siga en el cargo. Sin embargo, como el mismo lo dijo en 2013, «más allá del dinero está el honor». A Mauricio le ha llegado la hora de tomar una decisión sensata.
Redacción Match Tenis
