«La fiera» hizo un esfuerzo único para acompañar a su gran amigo.
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Conocidos en la vida hay muchos, amigos pocos, creo que es algo que casi todas las personas pueden asegurar. En el caso del deporte profesional se ve mucho esto, muchos atletas pueden llevarse bien y tener una relación cordial, pero quizá no hasta el punto de poder decir que son amigos verdaderos.
Por eso es increíble la relación tan cercana que han construido Roger Federer y Rafael Nadal, quienes a pesar de ser rivales acérrimos, demuestran un amor fraternal tan puro el uno por el otro, tanto así que el día de ayer pudimos ver al español desconsolado por el retiro de su gran amigo.
Horas después del partido que jugaron estas dos leyendas juntos, se ha comprobado aún más que el ibérico es un enorme ser humano, pues vino hasta Londres sólo para acompañar a Roger en su despedida, hizo el esfuerzo de jugar aún sin estar bien físicamente, pues como confesó en la rueda de prensa, volvió a tener un desgarro en su parte abdominal luego del pasado US Open.
De esta forma, el «Team Europa» se queda sólo con Novak Djokovic como abanderado del «big three», y se igualan de alguna forma las cargas con el «Team World», que intentará hacerse dueño de la Laver Cup por primera vez en la historia.
[author title=»Andrés Matallana Avella: » image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/666041598975852544/hSbddU6p_400x400.jpg»]Twitter @Andresf0724. Apasionado por el tenis. Disfruto del deporte blanco dentro y fuera de la cancha[/author]
