La tenista japonesa fue la encargada de cerrar la ceremonia de apertura de los Olímpicos.
Un tremendo honor fue el que tuvo este viernes la tenista japonesa Naomi Osaka, ya que fue la destinada a encender el pebetero olímpico de los Juegos de Tokio 2020, un suceso que siempre queda reservado para uno de los mejores atletas del país anfitrión.
La ex número uno del mundo y ganadora de cuatro Grand Slams es una de las candidatas a quedarse con la medalla de oro en la modalidad de sencillos, a pesar de que no compite desde hace casi dos meses desde su retiro en Roland Garros.
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El momento fue especial para el tenis con una Osaka que se vio monumental al subir por las escalinatas de la estructura que sostenía el pebetero, luego de haber recibido la antorcha de manos de seis estudiantes japoneses de las prefecturas de Iwate, Miyagi y Fukushima.
Vale recordar que Naomi Osaka se encuentra en la misma sección de la colombiana María Camila Osorio, incluso podrían enfrentarse en segunda ronda si ambas ganan en sus debuts.
Redacción Match Tenis
