El colombiano ha jugado cuadros principales de Grand Slam durante los últimos 13 años de manera ininterrumpida.
Hablar de Santiago Giraldo produce sensaciones distintas entre los aficionados del tenis colombiano. Tal vez por su forma de ser, por su manera de ver la vida o simplemente por llevar el peso de ser una figura pública. Más allá de eso, al pereirano nadie le puede quitar lo bailado y sus registros (Nº 28 del mundo en 2014 -ranking más alto de un colombiano en sencillos-, tenista con más victorias ATP del país en sencillos, líder indiscutido de la generación dorada del tenis colombiano, 1º colombiano en llegar a cuartos de final de un Masters 1000 -singles – dos finales ATP -Viña del Mar y Barcelona- y el jugador con más participaciones en Copa Davis y victorias en singles) lo han puesto en un lugar privilegiado en el país.
Antes de finalizar el año, el jugador de 32 años le concedió a Match Tenis una entrevista clara y concisa, en la que se tomó el tiempo de analizar las cosas buenas y malas que vivió esta temporada, lo que lo motiva a seguir jugando el circuito profesional, sus retos para el 2020 y, además, habló del sonado caso del equipo de Copa Davis.
P: No fue un 2019 muy satisfactorio en cuanto a resultados, pero ¿cómo lo califica según su percepción?
R: Fue un año en el que no jugué mucho. Cuando quería apretar después del Us Open -previo a la Davis en Madrid-., infortunadamente vino una pequeña lesión. También tuve otra molestia en Wimbledon y en los dos torneos siguientes.
Me quedo con mi punto y contribución para la victoria contra Suecia y con la clasificación del equipo a las finales en Madrid por primera vez en la historia del tenis de Colombia. Me quedo con los cuatro partidos del ATP de Houston, en el que serví por el partido contra Thompson, los tres partidos de Roland Garros y los otros cuatro del Us Open en Nueva York, que me permitió estar por 13º año consecutivo en los cuadros principales de los Grand Slams.
P: Pese a no ser un gran año, usted sigue teniendo números positivos: 22 triunfos en 39 partidos y, además, es la raqueta N°2 del país. ¿A qué cree que se debe que se mantenga ahí?
R: Sólo jugué 16 torneos oficiales y en cuatro o cinco estuve limitado físicamente. Otros jugadores, en promedio, juegan 30. Cuando juego me gusta estar competitivo y normalmente estoy competitivo, si estoy entrenado, sano y motivado estaré competitivo siempre, sino definitivamente no jugaría más al tenis.
P: La Copa Davis de Madrid fue un duro golpe para usted por el nivel que mostró. ¿Cómo superó ese difícil momento?
R: Para mi fue un golpe pero de satisfacción y alegría. Conseguí algo por lo que trabajé y trabajamos todas nuestras carreras, estar en el Grupo Mundial cuando menos lo creíamos; fue un premio de la vida que nadie nos regaló, estuvimos en Madrid ganándonos a pulso nuestro cupo. No habíamos conseguido estar en las finales ni yo estando top 30, Falla top 50, Gonzalez top 70 y los doblistas top 20. Competimos de tú a tú siempre con los mejores equipos del mundo en siete repechajes y no habíamos tenido el premio máximo. Una vez consiguiéndolo y recibiendo ese premio, ¿cómo iba a tomarlo como un golpe?
El tema aparte fue que no alcance (a pesar de que pensé que alcanzaría estar como quería) para mis partidos, pero fue por una lesión un tema que no depende de nosotros y que se dio después del Us Open con un tiempo de recuperación y puesta a punto muy justo. Apostamos en silencio con el equipo por llegar y sorprender allí y salió mal la apuesta. Me quedo completamente tranquilo con la intención y el fondo, y con qué no había nadie en el equipo en mejores condiciones para jugar de número dos.
P: Si tuviera que cambiar alguna decisión de este 2019, ¿cuál sería y por qué?
R: Jugar tan pronto después del Us Open, porque fue en el torneo en que me lastimé. Pero vuelve y juega, se hizo con buena intención, pues venía con ritmo, motivado y jugando bien. Hablar con el periódico de ayer en ocasiones es muy fácil.
P: Se le ve renovado de cara a este 2020. ¿Qué lo motiva nuevamente?
R: Me motiva todo. Mis capacidades, el equipo de Copa Davis y ver a Falla sentado allí. Mi relación con todos y con Galancho, especialmente. Siento que soy un buen ejemplo en todos los aspectos. También me motiva el cómo me siento, cómo me responde el juego y mi cuerpo, la confianza que todo mi entorno me tiene; los sponsors, los amigos, la familia… mejor dicho, todo. Para mí, por donde lo mire voy montado en el caballo ganador, en el tenis y en la vida, levantarse así cada día es espectacular y me genera una alegría, autonomía y libertad enorme.
P: ¿Cómo mantener esa motivación para todo el año?
R: Después de toda la vida jugando y de 13 temporadas a un alto nivel, para mi es un buen termómetro el que me guste pararme a entrenar, viajar y cuidarme con mis hábitos. Vivo el día a día y voy haciendo lo mejor que puedo en cada momento, así que no me enredo demasiado con suposiciones y futuros que aún no existen.
P: ¿Donde está realizando su pretemporada y en que aspectos de trabajo va a enfatizar?
R: Haré todo en Colombia. El físico siempre será prioridad, después hacer apuestas a cosas nuevas del juego, ¿por qué no? Más vale tarde que nunca. Ahí encuentro motivación y me auto-desafío a probar cosas, linda oportunidad, ¿no? Quiero sacar mejor el segundo saque -nunca lo hice- quiero usar más mi sílice y subir a la red. Antes de retirarme, quiero tener la chance de hacerlo y ponerlo en práctica.
P: Convivir con la derrota debe ser algo muy difícil. ¿Cómo aprendió a hacerlo o aún no se siente cómodo?
R: Es más divertido ganar obviamente, el que diga lo contrario -aunque se pudiese- estaría muy evolucionado y en el circuito competitivo no existe. La derrota sirve precisamente para entender mejor que si uno da lo mejor de uno no hay nada que reprocharse. Y si uno gana o pierde no va a ser mejor o peor que nadie. Al final el deporte es un gran maestro en lo que a evolución personal respecta.
P: En una entrevista afirmó que sino cumple su objetivo de este año podría retirarse. ¿Cuál es ese objetivo?
R: Dije que si no hacía nada especial era posible que fuera mi último año; también dije que incluso haciendo algo especial podría ser el último año. Lo que si dije es que no garantizo un retiro porque todo lo haré dependiendo de cómo me siento. No quiero ser esclavo de unas palabras momentáneas.
P: Finalmente, le pregunto por alguien y algo en especial. Usted es una persona que ha cambiado su forma de ser y se muestra sereno en lo que dice y lo que hace. ¿Estaría dispuesto a charlar con Nicolás Mejía de lo sucedido y aclarar lo que ocurrió, dejando atrás ese capítulo negro del tenis colombiano?
R: Nunca en mi vida le he quitado el saludo a nadie. Y creo que de las cosas más espectaculares que he aprendido es el ser impecable y claro como el agua, ser coherente al máximo y de la mejor manera, sabiéndome y respetándome con mis imperfecciones y carencias. Pulcro a la medida de lo que puedo con mis actos, acciones y palabras.
Para mi es simple, el que nada debe nada teme y el que actúa con un fondo noble y transparente siempre podrá caminar con alegría y desparpajo.
El capítulo para mi fue excelente y necesario desde el principio, para convertir algo negro y confuso, en blanco y claro. Mi primer tweet en medio del meollo fue simple: luz en la oscuridad. Este equipo es luz, claridad, pujanza y valores bellos y excelentes, estoy seguro que Nicolas y cualquier persona en el mundo prefiere subirse en un bus luminoso, que en uno tenebroso, lleno de cosas feas, oscuras y turbias.
Filosóficamente, para mí eso es la vida y todos tenemos esa opción todos los días. Este poder de elección nos da una oportunidad providencial y nos hace fuertes y grandiosos.
[author title=»Andrés Vargas Peraza » image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/1064624716093239296/ZyWDOQfI_400x400.jpg»]Periodista especializado en tenis. Exjugador de tenis con puntuación ITF. Miro el deporte desde una perspectiva diferente. Estuve en el lugar del deportista, ahora del periodista. Director y editor del portal www.matchtenis.com Twitter: @andresvarperaza. [/author]
