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Sara Errani afrontó con serenidad y cierta amargura su última participación en el cuadro individual del WTA 1000 de Roma, un torneo que ha marcado su carrera y al que siempre ha estado profundamente vinculada. Tras su derrota ante Naomi Osaka, la tenista italiana compartió reflexiones sinceras que resonaron entre los aficionados, no solo por el resultado en sí, sino por el inevitable paso del tiempo que empieza a marcar el final para una jugadora que marcó una épooca en el tenis italiano.
“Seguramente no es fácil aceptar que ya no puedes hacer ciertas cosas porque el cuerpo no responde como querrías”, expresó Errani. “Los golpes no salen como quisiera. No es fácil de aceptar, pero hay que hacerlo de alguna forma”. A pesar de haber tenido oportunidades en el segundo set —“Iba 3-1 y tuve pelotas para el 4-2”—, Errani se mostró realista: “Lo intenté, estuve ahí, pero desde el inicio del torneo dije que mi prioridad ahora es el dobles, es mi enfoque principal en este momento”.
A sus 38 años, Sara Errani, al igual que su compatriota Fabio Fognini —quien también se despedirá este año del Foro Itálico—, está cerrando el capítulo del tenis individual en su carrera. “Ya lo había dicho: este sería mi último año en individuales, y probablemente Roland Garros será mi último torneo en esta modalidad. Seguiré jugando este año en dobles, no sé si el próximo año continuaré, dependerá de cómo vayan las cosas en esa categoría”, comentó con honestidad.
Match Tenis dice presente en la capital italiana para realizar la cobertura, gracias al respaldo de Sebas Tennis Coach y Akraw Química, empresa especializada en la producción y comercialización de productos químicos.
