La tenista rumana no la tuvo fácil ante la estonia Kaia Kanepi, verdugo suya en la primera ronda del pasado US Open
La líder de la clasificación mundial, la rumana Simona Halep tuvo un debut complicado en el Abierto de Australia, pues necesitó de tres sets para avanzar a la siguiente fase. Halep, finalista el año pasado de este certamen tomó revancha de la estonia Kaia Kanepi, verdugo suya en el pasado US Open y la superó por 6-7(4), 6-4 y 6-2 tras una lucha que superó las dos horas.
Todo parecía indicar que la historia se iba a repetir, y que, además, iba a haber un relevo en la cima de la clasificación mundial, pues la estonia lideraba 7-6(4) y 2-1 con quiebre a favor; sin embargo, Halep sacó a relucir todo su repertorio, igualó la pizarra en el segundo parcial y siguió de largo para forzar un tercer y definitivo set.
El parcial decisivo daba la sensación que iba a ser igual de parejo a los dos anteriores; ya que, ambas tenistas ganaron con relativa facilidad su primeros dos juegos de saque, pero luego Halep se montó en el partido, quebró dos veces y con ello saldó una vieja deuda. «Sé que ella está golpeando la pelota muy fuerte, y que iba a tomar tiempo obtener la ventaja en el partido. No me rendí, lo cual fue muy importante esta noche», expresó la primera sembrada.
Indagada sobre el inminente peligro de ceder el trono, teniendo en cuenta su falta de ritmo dentro de la cancha, expresó: «Estoy dando lo mejor de mí, para encontrar el ritmo. Siento que voy bien. Trato de disfrutar y ser feliz en la cancha, así que los resultados no importan».
En segunda ronda, la rumana aguarda por la estadounidense Sofia Kenin, tenista que llega en buen ritmo y con un nivel de confianza alto, ya que la semana pasada conquistó su primer título WTA al coronarse en Hobart. Este será el primer enfrentamiento entre ellas.
Redacción Match Tenis