Jannik Sinner sigue avanzando en el Masters 1000 de Roma, pero no sin contratiempos. El italiano superó este viernes un exigente duelo ante Tommy Paul por las semifinales, aunque durante el tercer set se le notó con dificultades para desplazarse con normalidad por la cancha. Las imágenes despertaron preocupación entre los aficionados, que se preguntaban si el número dos del mundo arrastraba algún tipo de molestia física.
Tras el encuentro, el propio Sinner despejó las dudas durante la entrevista en la cancha. Con la serenidad que lo caracteriza, explicó el origen de sus problemas de movimiento: “Desde la tercera ronda, tengo una ampolla en un pie que no me deja moverme del todo bien”, reveló.
Pese a ello, el italiano dejó claro que no utilizará la dolencia como justificación ante un eventual bajón en su rendimiento: “No me preocupa demasiado, pero tengo que cuidármela bien de cara al domingo. No hay excusas posibles”, sentenció, dejando en evidencia su mentalidad competitiva.
El equipo de Sinner trabaja ahora contrarreloj para garantizar que llegue en las mejores condiciones posibles a la final ante Carlos Alcaraz. La ampolla puede parecer un problema menor, pero en el más alto nivel del tenis, cada detalle cuenta.
Match Tenis dice presente en la capital italiana para realizar la cobertura, gracias al respaldo de Sebas Tennis Coach y Akraw Química, empresa especializada en la producción y comercialización de productos químicos.
