El tenista colombiano Robert Farah podría hacer parte de esta lista
El dopaje toca a la puerta del tenis colombiano, siendo el doblista Robert Farah el implicado. Y es que este martes 14 de enero fue negro para el ‘deporte blanco’ suramericano, pues, además del caso de la raqueta cafetera, se conoció la sanción provisional del chileno Nicolás Jarry, a quien le encontraron metabolito Ligandrol, y el metabolito Stanozol en su organismo, luego de un control en la pasada Copa Davis.
A raíz de esto, en Match Tenis nos dimos a la tarea de investigar sobre tenistas que han dado positivo a controles antipoding, y lastimosamente, estos no son los únicos en Suramérica. El primer caso de dopaje en el tenis lo produjo el español Ignacio Truyol, quien a comienzos de la década de los noventa le detectaron en su organismo esteroides anabolizantes y magnesio, los cuales consumió por dolores en su espalda, ello desencadenó en un año de suspensión.
En el año 1995, el sueco Mats Wilander y el checo Karel Novacek dieron positivo por cocaína, noticia que se conoció dos temporadas más tarde. En 1998, el checo Petr Korda, campeón ese año del Abierto de Australia dio positivo por nandrolona, fue suspendido un año, sanción que jamás cumplió, pues se retiró del tenis.
En esa lista también aparecen nombres como los del eslovaco Karol Beck, suspendido dos años tras dar positivo por clembuterol en un control llevado a cabo en 2005, en el marco de la semifinal de Copa Davis ante Argentina. Una de las grandes referentes perjudicadas por esto fue la suiza Martina Hingis, quien en 2007 dio positivo por cocaína. Esta sustancia también fue encontrada en organismos de tenistas como el francés Richard Gasquet, el británico Daniel Evans, el alemán Maximilian Abel y la española Lourdes Domínguez-Lino.
Tal vez, el mayor escándalo en los últimos años fue el de la rusa Maria Sharapova, apeada de toda competición por consumir Meldonium, un medicamento para evitar enfermedades cardíacas. Otros casos son los del croata Marin Cilic y el serbio Viktor Troicki; el primero fue suspendido nueve meses por niketamida, en un control realizado en el ATP 250 de Múnich, y el segundo apartado de toda competencia por 18 meses, tras no permitir que le tomarán una muestra de sangre.
El castigo más severo fue al estadounidense Wayne Odesnik, sancionado por quince años al dar positivo por androtestosterona y GHRP-6, los cuales permiten el crecimiento de las hormonas. Es de anotar que, fue la segunda vez que dio positivo por lo mismo.
Los casos de dopaje también tocaron a Argentina
El país de Suramérica más afectado por casos de dopaje es Argentina. En 2000, el calvario empezó con Juan Ignacio Chela, sancionado por metiltestosterona en Cincinnati; un año más tarde afectaría a otro referente, Guillermo ‘El Mago’ Coria, suspendido por siete meses al detectarle en su organismo nandrolona. En 2005 sancionaron a Mariano Puerta, finalista en aquella edición de Roland Garros y Guillermo Cañas; al primero se le encontró Etilefrina y al segundo Hidroclorotiazida.
El año pasado, de nuevo el tenis albiceleste estuvo en el ojo del huracán por esto, pues Mateo Martínez, Franco Agamenone y Luciano Tacchi les encontraron sustancias no permitidas en su organismo.
El doping también ha afectado a Brasil, pues a Thomaz Bellucci en 2018 le encontraron sustancia hidroclorotiazida y fue apartado por cuatro meses; mientras que, en 2019 la afectada fue Beatriz Haddad-Maia dio positivo por un anabolizante durante un torneo que disputó en Croacia.
[author image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/532902040893022209/gonhrGnQ.jpeg» ]Francisco Vargas: Twitter @VargasPacho. Periodista especializado en tenis con una experiencia de 8 años en los diferentes circuitos de la ATP , y WTA. Voice Over en eventos internaciones. [/author]