El Sistema UTR cuenta con 1.700.000 jugadores registrados, de 200 países; verifica alrededor de 14 millones de resultados por año, y ejecuta, por lo menos 1.500 torneos por mes.
Mucha resistencia en Sudamérica, ha generado la implementación del Sistema UTR. Según Andrés Castillo, manager de esta plataforma en el Continente, “la razón obedece al convenio que tienen estas organizaciones con la ITF, lo que pone en riesgo, los aportes económicos que reparte el máximo ente del Tenis Mundial”.
De toda esta problemática, los principales damnificados son los jugadores, que pierden oportunidades de oro para entrar en el radar de los coachs americanos, en busca de “refuerzos” para sus respectivas universidades. De hecho, UTR, es la calificación oficial de la ITA (Intercollegiate Tennis Association).
Sin embargo, este Sistema, que es catalogado como “competencia”, podría convertirse en tabla de salvación, para la reactivación de los torneos en el país.
Para el 11 de mayo, el Gobierno Nacional tiene proyectado la terminación de la cuarentena, pero como lo afirmó recientemente el doctor Fernando Ruiz Gómez, Ministro de la Salud, será de manera parcial, ya que solo se dará la posibilidad de dar apertura a algunos sectores para restablecer la economía. Uno de los actores que tardará más tiempo en volver a escena será el deporte, actividad que congrega una buena cantidad de público, entre aficionados, practicantes y acompañantes. En este sentido, las Federaciones de Tenis y Golf expidieron un comunicado, donde argumentan, de manera concreta, algunas razones por las que estas disciplinas pueden comenzar a operar primero que las demás. La más importante es que “tanto el tenis como el golf no son deportes de contacto, ni de proximidad social, ya que se practican al aire libre”.
Y aquí el UTR puede ser protagonista, porque facilitaría que los jugadores retomen la competencia, y generar algunos ingresos económicos para las organizaciones.
La plataforma es muy versátil; permite organizar diversidad de torneos, entre ellos, masivos, por dinero, round robin, equipos, entre otros, con un mínimo de ocho jugadores. En esta alternativa, la gran apuesta para los clubes y deportistas son los eventos Match Play, torneos cortos, con partidos internos, entre jugadores de similar rango UTR, que además de fortalecer la competencia, serán verificables para la puntuación. Con ocho participantes, solo se requieren cuatro canchas, y cada uno de los deportistas se le garantizarán mínimo tres partidos.
Antioquia es la única liga del País que cuenta con la franquicia UTR, (En Bogotá, la Academia Colombiana de Tenis) y esta exclusividad le permitirá sacar a relucir su creatividad y liderazgo, para generar ingresos, y poner a caminar la competencia tenística, después de la emergencia del Covid-19.
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