El deporte es una herramienta educativa, capaz de promover educación en valores y juego limpio a través de la práctica deportiva y ejemplos positivos; además es capaz de potenciar valores humanos que contribuyen en la formación del deportista y al mismo tiempo le ofrece la posibilidad de descubrir la confianza en si mismo, el valor del esfuerzo, espíritu de excelencia, fuerza de voluntad, disciplina, trabajo en equipo y otras muchas más actitudes que infieren en la vida diaria del deportista.
El juego limpio es un término complejo que comprende y relaciona una serie de valores que son fundamentales en la práctica y competición deportiva, más que el respeto de la reglas del juego y reglamentos de los torneos, este también incluye conceptos importantes como la amistad, respeto por el adversario, los árbitros y espíritu deportivo. El juego limpio es además un comportamiento, un modo de pensar y una actitud favorable a la lucha contra la trampa y el engaño.
Los padres, entrenadores, árbitros, directivos y dirigentes deportivos deben velar y fomentar una conexión entre el deporte, la educación y la cultura que se vea reflejada en un ejemplar comportamiento que sirva de modelo para los futuros deportistas del alto rendimiento en el tenis colombiano, aportando en estos mismos actitudes de lealtad, respeto, solidaridad y juego limpio en medio de las competiciones.
Es importante tener en cuenta que el deporte por sí solo no educa el deportista, son los entrenadores, padres de familia y demás dirigentes deportivos que brinden apoyo a este mismo los responsables y principales protagonistas de que esto suceda, por lo tanto su coordinación es fundamental en la formación personal, profesional, y deportiva del individuo.
Es necesario concienciar a los entrenadores y padres de familia de la vital importancia que tiene su rol dentro de la formación de valores y juego limpio en el deportista, sus comportamientos y actitudes antes, durante y después de los partidos y el respeto con el adversario frente a la victoria y derrotas.
Autores: Viky Núñez Fuentes y Jeimy Andrea Merchán T.
