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Ha dado inicio el WTA 1000 de Toronto y apenas en la primera ronda ya hemos tenido el primer gran encuentro del torneo canadiense que ha tenido como protagonistas a Naomi Osaka y Ons Jabeur, que bien podría ser tranquilamente una semifinal como mínimo.
Finalmente, se ha impuesto con solvencia la jugadora japonesa por 6-3, 6-1 en apenas una hora y doce minutos para firmar su pase a la segunda ronda del National Bank Open, firmando el que es su primera victoria en Toronto desde 2019, año en que alcanzó los cuartos de final ganando en su camino a Iga Świątek, por entonces fuera del Top 50 y siendo derrotada por Serena Williams.
Ahora, ante la tunecina, tuvo un gran inicio, liderando por 3-0 y con un gran juego con su saque allanaría el camino al triunfo, llevándose el primer set por 6-3 en 39 minutos de juego. Ya en la segunda manga, desarmó por completo el juego de Jabeur, quebrando sus tres juegos al servicio y siendo imparable a partir del tercer game para endosarle un 6-1 con los seis juegos al hilo en apenas 33 minutos.
Tras su triunfo, Osaka declaró como se siente con su juego en pista dura cuatro meses después de pisar por última vez esta superficie en el WTA 1000 de Miami, donde cayó derrotada en tercera ronda ante Caroline Garcia:
Creo que he jugado muchos partidos en pista dura y he aprendido mucho de mi último partido en pista dura, contra Caroline García en Miami. Ha tardado un poco en llegar, pero estoy muy contento de volver a la pista dura y creo que, no sé, incluso la forma en que vuelvo ahora la he tomado de la tierra batida, así que espero poder seguir aplicando las cosas que he aprendido a lo largo de los meses.
Su siguiente reto será ante la belga Elise Mertens, ante quien suma un historial de cuatro victorias y dos derrotas, con dos duelos este año: una derrota en Indian Wells por 5-7, 4-6, mientras que en la hierba de S’Hertogenbosch la venció por 6-2, 6-4.
