Está claro que la realidad del tenis alrededor del mundo dista bastante de lo que vemos en los torneos de élite, donde las grandes figuras gozan de hospedajes de lujo, transporte exclusivo, regalos y elogios de todo tipo. Lo que cualquiera quisiera tener.
Pero para la inmensa mayoría de jugadores profesionales, el simple hecho de disputar un torneo fuera de su ciudad de origen -ni hablar del país- requiere sacrificios que solo ellos conocen a profundidad. Y es por eso que el amor genuino por el deporte, la pasión y el compromiso abundan en los primeros niveles del tenis mundial.
En Colombia encontramos innumerables casos de jóvenes que dedican su vida para alcanzar el profesionalismo, aún siendo conscientes de los obstáculos que existen en la región, y Andrés Urrea encarna este ejemplo. Sin embargo, como todos, el bogotano ha tenido que sortear las dificultades extra de la pandemia para mantenerse en pie y cumplir sus objetivos.
- El tiempo pasa y usted sigue trabajando con la ilusión de estar entre los mejores del mundo. ¿Qué es lo que lo motiva a seguir?
Tengo que seguir intentándolo, porque es mi sueño de toda la vida; disfruto mucho de jugar al tenis y el proceso que hay detrás. Las cosas siempre se ponen difíciles y más ahora con las consecuencias de la pandemia, pero no puedo dejar a un lado este proyecto que comenzó hace un poco más de 3 años, porque si me rindo creo que me puedo arrepentir en el futuro.
- ¿Qué tan difícil ha sido competir tras la pandemia?
No ha sido fácil pero creo que he podido competir lo suficiente. No he podido jugar futuros porque han habido muy pocos torneos en la región, además que viajar es un riesgo para la salud y hay mucha incertidumbre por el Covid. Sin embargo, el Colsanitas Open que organizó fue un evento muy positivo que nos ayudó a muchos, porque nos dio un motivo para prepararnos para una gira y evaluar nuestro a nivel frente a otros jugadores profesionales del país.
- Cuéntenos detalles sobre su preparación para la temporada 2021
El 13 de enero viajé a Cancún para comenzar mi pretemporada y la idea es comenzar a competir en febrero. Tengo en mente jugar algunos torneos en Estados Unidos y también existe la posibilidad de viajar a Turquía, Túnez o Egipto, donde hacen futuros casi todo el año. En el verano tengo planeado ir a Europa como lo he hecho los últimos años para competir y jugar torneos interclubes.
- Usted ha obtenido mejores resultados en la modalidad de dobles a lo largo de su carrera. ¿Ha considerado especializarse en esa modalidad?
Sí, cada vez me siento con más confianza en mi juego de dobles y tengo en mente dedicarle más tiempo a mejorar detalles que me permitirán ganar torneos este año. Sin embargo, tengo que buscar una pareja que tenga las mismas metas que yo para que sea más fácil organizar giras de torneos y entrenamientos.
- Si en sencillos es difícil encontrar estabilidad económica, en dobles es mucho más complicado. ¿Cómo piensa sostener su carrera?
Esta es la duda más grande que tenemos todos los tenistas de mi nivel, no sólo los que pensamos en jugar dobles. Los costos de viaje son muy altos y para cubrirlos tengo que estar obteniendo resultados muy buenos constantemente; y pasa que cuando eso se da, técnicamente ya estás listo para jugar el circuito Challenger, donde pagan mejor.
Pero comencé a tomar cursos de programación y data science para trabajar como independiente cuando tenga tiempo. Algo que aprendí en la cuarentena es que hay demanda en línea para trabajos relacionados con estos temas y me gustaría probar suerte. También he recibido ayuda por parte del IDRD gracias a que fui parte del equipo de Bogotá en Juegos Nacionales de 2019, y esto me ayuda a tener un presupuesto más flexible.
- La pandemia fue difícil para todos, incluidos los deportistas. ¿Pensó en dejar el tenis?
A pesar de que amo el tenis, sí pensé en dejarlo. Aún lo pienso a veces, porque ya no tengo 15 años y ya tengo que pensar de qué voy a vivir. Con menos torneos en el calendario y por la situación económica mundial, se puede pensar que en los años próximos vamos a tener menos oportunidades para jugar. Pero tengo que pensar positivo porque no quiero ponerme aún más presión a la hora de jugar.
- En Colombia parece cada vez más difícil ser profesional, porque no hay torneos y son muy pocos los jugadores para entrenar. ¿Está de acuerdo?
De acuerdo con que no hay torneos. Es una lástima que en los últimos años tuvimos uno o dos futuros anuales después de tener más de 10 futuros, varios torneos Challenger y un torneo ATP. Jugadores para entrenar sí los hay, porque somos varios con puntos ATP y también están los que están estudiando en Estados Unidos.
Mi opinión es que no hay suficientes sitios donde se pueda tener un entrenamiento para profesionales, con gimnasio y buenas canchas. Los únicos sitios así son los clubes, donde prácticamente sólo tienen acceso los socios, y en la Federación no es tan fácil porque muchos jugadores no nos queremos preparar en Bogotá. Sería interesante si la Federación organizara algo para que los jugadores profesionales podamos entrenar juntos sin que haya problema por los turnos de cancha y donde tengamos acceso a un gimnasio.
- ¿Qué jugadores ve con proyección para ser profesionales? ¿Por qué?
Enrique Peña me sorprendió bastante en los torneos del Colsanitas Open. Ha trabajado bastante y mejoró mucho el año pasado, asó que creo que fue merecida su entrada al Equipo Colsanitas. Por otro lado, Johan Rodriguez tiene muy buena proyección porque tiene excelentes recursos en su juego. Creo que también tenía méritos para entrar al equipo.
No hay que dejar a un lado a jugadores como Sergio Hernández y Alejandro Hoyos, que están haciendo un buen proceso. Todavía son muy jóvenes y en cualquier momento pueden despegar, como en su momento lo hizo Galán, cuando sí había torneos.
[author image=”https://pbs.twimg.com/profile_images/1122365846247096320/gFoXr9nB_400x400.jpg” ]Marcelo Becerra Concha (@Marcelob11) Disfruto conociendo el mundo del deporte desde adentro. Bogotá.[/author]
