La australiana se vio emocionada tras conseguir su segundo trofeo de Grand Slam.
Ashleigh Barty consiguió en Wimbledon uno de esos trofeos que los deportistas siempre sueñan en alcanzar. La tenista australiana de 25 años se coronó este sábado en la final ante Karolina Pliskova y ganó no solo su cuarto título del año y el 12° como profesional, sino también su segundo Grand Slam tras Roland Garros en 2019.
Barty, que sigue con el dominio del circuito WTA y extenderá su mandato como número uno del mundo, habló en rueda de prensa sobre lo especial que fue el momento cuando concretó el match point, y luego se le vio incrédula ante lo logrado en el césped de Londres.
«Es la sensación más increíble que he tenido en una cancha de tenis. Ciertamente hubo incredulidad», comentó la tenista de Ipswich tras la hazaña. «Creo que he trabajado muy duro toda mi carrera con mi equipo y con las personas que más significan para mí para intentar alcanzar mis metas y mis sueños. Poder hacer eso hoy fue increíble«.
No solo es un título que empieza a engrandecer su historia en este deporte, sino que también es especial porque hace 41 años una australiana no reinaba en estas tierras desde que lo hiciera Evonne Goolagong en 1981, y 50 años del primer título de esta deportista en tierras londinense.
«Poder tener éxito aquí en Wimbledon, lograr mi mayor sueño, ha sido absolutamente increíble. Las estrellas se alinearon para mí durante los últimos quince días. Increíble que también haya ocurrido aquí en el 50 aniversario del primer título de Evonne, es absolutamente increíble», afirmó.
Barty también tuvo la oportunidad para hablar de uno de los momentos más tensos para ella en el partido, y fue en el 6-5 del segundo set sacando para partido, momento donde Pliskova quebró y luego terminó llevándose ese set en el tiebreak.
«Creo que tratando de sacar el partido en el segundo set, le di a Karolina una ventaja. Ella la agarró con ambas manos. El poder tener un reinicio en el tercer set fue importante para que yo pudiera ir subiendo en los puntos. En eso era en lo que me estaba concentrando. Hacer lo mejor que pudiera en cada punto independientemente del marcador«.
Por último, Barty también enfatizó en la lesión que tuvo en la cadera en el pasado Roland Garros y que la llevó a retirarse en su partido de segunda ronda. Y que además, no le permitió jugar algún torneo en previo con el objetivo de llegar a Wimbledon. Para la australiana es casi un milagro lo hecho en Londres.
«Charlando con mi equipo ahora me doy cuenta que no me dieron mucha información que habían tenido de otros especialistas sobre la lesión. En cierto sentido, es una lesión de dos meses, así que poder jugar aquí en Wimbledon fue nada menos que un milagro«.
Y cerró: «Creo que poder jugar sin dolor en este evento fue increíble. Es gracioso, a veces las estrellas se alinean, puedes pensar positivamente, puedes planificar y eso ayuda a perseguir tus sueños. Creo que ha sido un mes increíble«.
Redacción Match Tenis.
