El alicantino se clasificó a la segunda ronda de Auckland contra todos los pronósticos.
Desde el puesto 125º del mundo, David Ferrer afronta su último torneo en este continente, y aunque parezca paradójico, esta en mejor forma que muchos de sus rivales. Este martes, en su debut en el ATP 250 de Auckland, lo demostró con una contundente victoria ante Robin Haase, a quien superó por 6-2 y 6-1 en tan solo una hora de juego.
Para el cuatro veces campeón en suelo neozelandés (2007, 2011, 2012 2013) fue una actuación notable en la que tan solo cedió once puntos cuando estuvo al servicio y además, consiguió seis quiebres a su favor. Lo anterior lo depositó en la segunda ronda donde se medirá a su compatriota Pablo Carreño Busta.
«Estoy realmente contento de poder jugar un partido más en esta cancha», aseguró tras el encuentro. «Muchas gracias a todos por su apoyo, es realmente emocionante para mí«.
Tras este torneo, el de Javea disputará Buenos Aires, Acapulco, El Conde de Godó y colgará la raqueta en el Masters 1000 de Madrid. Respecto a sus últimos desafíos como tenista profesional, ‘Ferru’ aseguró que su meta es «terminar de la mejor manera posible». Y agregó: «Procuro disfrutar cada momento que paso en cancha«.
Durante la jornada del ASB Classic también se presentaron dos argentinos con suertes dispares: Leonardo Mayer superó a Steve Johnson por 7-5 y 6-3; mientras Guido Pella cayó ante Peter Gojowczyk por 1-6, 6-3 y 2-6.
Redacción Match Tenis
