El español Rafael Nadal y el serbio Novak Djokovic jugarán mañana una semifinal de lujo en el torneo de tenis de Montecarlo, donde el rey de la arcilla se medirá al hombre que esta temporada pretende destronarlo.
Foto:
Ocho veces campeón en el Principado, Nadal tumbó hoy en cuartos a su compatriota David Ferrer por 6-4, 5-7 y 6-2 en un partido entre dos titanes de la arcilla. El duelo demandó dos horas y 44 minutos de esfuerzo y concentración a Nadal, que podría pagar el gasto de energía mañana cuando se enfrente a Djokovic, el número uno del mundo y el tenista más en forma del circuito. El número uno del mundo tuvo un partido mucho más sencillo ante el croata Marin Cilic, al que atropelló por 6-0 y 6-3.
Nadal y Djokovic se medirán mañana por cuadragésima tercera vez, todo un récord en el «tour» profesional. El español lidera la serie por un ajustado 23-19 y se impuso en su último duelo, las semifinales de Roland Garros en 2014.
El torneo parisino es precisamente el gran objetivo de ambos tenistas. Nadal aspira a su décimo título en el Abierto de Francia, donde espera coronar su recuperación anímica y tenística después de un comienzo de temporada lleno de dudas. Djokovic, que ha ganado los tres torneos más importantes de 2015, pretende destronar a Nadal y levantar por primera vez la Copa de los Mosqueteros. Antes de que llegue ese momento, sin embargo, ambos tendrán mañana un test clave.
Nadal dio hoy otro paso más en la recuperación de su mejor nivel. El cuarto cabeza de serie superó una de sus mayores pruebas al imponerse en Montecarlo a otro gran especialista sobre polvo de ladrillo en una desgastante batalla física y mental. «Estás bien, estás bien», le dijo Ferrer a Nadal en su saludo en la red tras el final del partido. Ferrer parecía rendido al comienzo del segundo set, pero se recuperó de un 3-0 abajo y llevó el partido al tercer parcial.
Nadal, ocho veces campeón en Montecarlo, no perdió la concentración y volvió a romper el servicio de su rival nada más comenzar el set para ponerse 2-0. Su segundo break, para el 5-2, fue definitivo, ya que luego no desaprovechó el primer «match-point» con su servicio para cerrar el partido. «Estoy muy feliz de estar en semifinales», dijo Nadal. «Estoy contento con mi nivel en este partido. David jugó muy bien, fue una gran actuación de los dos. El partido con Novak va a ser duro, él está ahora mismo muy por delante del resto de jugadores», añadió.
Djokovic está a dos victorias de convertirse en el primer tenista en ganar los tres primeros torneos de Masters 1.000 de la temporada, después de imponerse en Indian Wells y Miami, además de haber ganado en el primer Grand Slam, el Abierto de Australia.
El serbio busca además igualar a Nadal ganando cuatro títulos de categoría Masters 1.000 consecutivos. El español lo hizo en 2013 en Madrid, Roma, Montreal y Cincinnati.
El número uno no dio hoy ninguna opción a Cilic, a quien batió en apenas 65 minutos de juego. «Fue probablemente mi mejor partido del torneo. Eso es lo que quiero, lo que deseo en este momento», dijo Djokovic, que ganó los 12 partidos que jugó ante el campeón del Abierto de Estados Unidos de 2014.
«Obviamente, el número de partido que gané esta temporada han mejorado mi confianza», admitió. «Me han ayudado a sentirme bien en este torneo y continuar haciendo buenos partidos», añadió.
DPA
