La tenista italiana, que el pasado mes de abril disputó el WTA de Bogotá vuelve a ser noticia y no precisamente a nivel tenístico. Sara Errani, quien llegó a ser cinco del mundo y finalista de Roland Garros, no pasó un control antidoping en el inicio de este 2017, por haber sido encontrado en su organismo anastrozol, que se usa para tratar el cáncer de mama después de la cirugía. El fármaco está considerado dentro de las sustancias anabolizantes, que altera el metabolismo y provoca mejoras en el rendimiento deportivo. Lo anterior fue confirmado por la ITF, ente que rige este tipo de temas a nivel mundial y la sanción para la nacida en Bologna fue de dos meses.
Redacción Match Tenis