Sin vueltas, Roger Federer fue gráfico tras la caída ante Novak Djokovic en semifinales del Abierto de Australia, repitió elogios para el N°1 del mundo y se mostró satisfecho con el balance de su recorrido en Melbourne.
Federer cayó por 6-1, 6-2, 3-6 y 6-3, en un duelo que antes de la hora de juego ya tenía al serbio dos sets al frente: «He visto a Novak jugar así de bien anteriormente, pero se hace muy difícil cuando ocurre desde el arranque, porque uno se queda tratando simplemente de dejar de sangrar en algún momento».
«Hace tiempo ya que Novak optimizó cada aspecto de su juego. Hoy saca con mucha precisión y devuelve muy bien, por eso puede de un momento a otro quedar un par de sets arriba antes de que uno llegue a hacer demasiado. Cuando está en racha, es difícil de frenar», ilustró Federer.
Y siguió: «De pronto pasan 45 minutos y uno ya queda en una situación donde es muy difícil volver a meterse, porque no hay mucho margen en instancias como esta. Hoy logré encontrar una manera, empecé a jugar mejor y hubo partido por un rato, lo cual se sintió bien. Pero obviamente es una desilusión que no hayan salido mejor las cosas».
Con esta derrota, Federer suma cuatro consecutivas ante Djokovic en torneos de Grand Slam. Pero en partidos a tres sets sí lo pudo vencer (y por triplicado) en el último año. De todas formas, para el suizo el formato no cambia la ecuación: «No siento que jugar al mejor de cinco sea el problema. No me cambia correr por cuatro o cinco horas. Sé que ustedes los periodistas piensan distinto, que estoy viejo y todo eso, pero a mí no me preocupa», rechazó en conferencia.
En el balance, de todas formas, la travesía por Melbourne deja buenas sensaciones para Federer, que alcanzó semifinales de un Grand Slam por 39ª ocasión en su carrera (récord). «Me siento bien, con mucha confianza en mi juego. Y eso no se desvanece de un día para el otro. Creo haber tenido un cuadro difícil en este torneo y pude llegar lejos, así que me voy contento con este arranque de temporada».
Redacción ESPN Deportes
