El suizo se despidió de París mostrándose conforme con el papel que cumplió en su regreso a la arcilla.
Lo ocurrido este viernes en la Philippe Chatrier no soporta discusión alguna. Pasaron los años, pero sucedió lo mismo que sucedía en la década pasada; Rafael Nadal haciéndole saber a Roger Federer -y al mundo- que no hay otro como él cuando se trata de jugar sobre tierra batida.
Y el suizo es muy inteligente. Por eso no se desgastó buscando excusas para su derrota en tres sets. «No hay nadie que pueda acercarse a cómo juega Nadal -en arcilla-. No sé con quien debería entrenar para encontrar alguien que juegue parecido a él«, comentó el helvético en declaraciones recogidas por Punto de Break. Pero agregó: «Pienso que no jugué mal. Él tuvo que sacar su tenis para marcar la diferencia».
Sin duda, la capacidad de adaptación para jugar en medio de los ventarrones fue determinante en el trámite del encuentro. Aunque, cabe decir que Roger desperdició oportunidades de quiebre -además de ceder saque- estando en el lado donde menos afectaba el viento. Nadal fue letal para capitalizar los errores de su rival. «(La forma de defender del español) Hace muy complicado encontrar un hueco, especialmente con viento. Él ha sido mejor, sin duda«.
Más adelante hubo tiempo para hacer un balance de su regreso a Roland Garros tras cuatro años. «Mi decepción por la derrota es baja (…) Me he sorprendido a mí mismo por lo lejos que he llegado aquí», sostuvo Federer en el día que se cumplen diez años de su única consagración en París.
Por su puesto, los elogios para la gente no faltaron. «Lo he disfrutado mucho. El apoyo de la gente no ha podido ser mejor. Siempre han estado apoyándome en los partidos, en los entrenamientos o en los pasillos», cerró.
[author image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/1122365846247096320/gFoXr9nB_400x400.jpg» ]Marcelo Becerra Concha (@Marcelob11) Disfruto conociendo el mundo del deporte desde adentro. Bogotá.[/author]