Jannik Sinner no solo conquistó su primer título de Wimbledon este domingo, también ganó una curiosa apuesta que podría cambiar los planes de su entrenador, Darren Cahill. El italiano reveló, entre risas, que antes de la final pactaron una condición especial: “Hicimos una apuesta antes de la final… Le dije que si ganaba, yo podría decidir si se quedaba al final del año o no. ¡Ahora la decisión es mía!”
Cahill, uno de los entrenadores más respetados del circuito, había anunciado su intención de retirarse de la actividad a final de temporada. Sin embargo, el vínculo con Sinner —y los recientes éxitos del italiano— podrían hacerle replantear su decisión.
Más allá del tono jocoso, Sinner dejó claro lo importante que es su presencia en el equipo: “Siempre he buscado una persona honesta que me aporte mucho, no solo en la pista, sino también fuera de ella, tanto en los momentos de éxito como en los de decepción. Y él es excelente en eso”.
Aunque Sinner reconoce que Cahill podría reducir sus viajes si decide seguir, espera seguir contando con su experiencia y cercanía. “Si elijo seguir con él, probablemente no viajará tanto, y eso es normal. Siempre le he dicho que me gustaría tenerlo en Australia, porque las cosas van bien allí. Además, la temporada todavía es larga, quedan muchos torneos por delante y lo seguiré viendo bastante”.
View this post on Instagram
