Foto tomada: http://trome.pe/
La Copa Davis, el Mundial del tenis como muchos lo conocen, se basa en una premisa como los grandes eventos del mundo: contar con sus mejores exponentes en los países participantes. Pero por muchos años hemos observado como las grandes figuras dejan a un lado representar a su país en este evento por las muchas obligaciones que tienen en el año y, además, evitar un desgaste que puede significar perderse un Grand Slam o un Masters 1000 que los jugadores tienden a priorizar por sobre la competencia mundial del tenis.
Este año y en vísperas de una primera ronda en el Grupo Mundial vemos cómo se van bajando muchos jugadores top, a veces por decisiones propias de ellos y otras por determinación de sus respectivos capitanes; pero que sin dudas es una falta grande para esta clase de evento. Tal es el caso de Roger Federer y Stanislas Wawrinka con Suiza o de Tomas Berdych con República Checa, quienes decidieron priorizar su carrera individual, pero dejando un toque de decepción en los seguidores de este campeonato.
Otra es la historia de Juan Mónaco con Argentina y Alejandro Falla con Colombia, quienes queriendo jugarla, no van a poder estar contra Brasil y Uruguay, pues sus capitanes Daniel Orsanic, recientemente nombrado por la AAT (Asociación Argentina de Tenis), y Mauricio Hadad respectivamente, decidieron no contar con ellos pese a su experiencia en Copa.
Muchos cuestionan la forma en que se juega la Copa Davis pero esta emociona a los amantes del tenis porque trae jugadores que de ninguna otra manera se podrían ver en sus respectivos países. Ese fue el caso hace unos años en Bogotá con la presencia del equipo estadounidense, conjunto que trajo figuras como Mardy Fish y John Isner y que dejaron gratas sensaciones por su gran estilo de juego. Por ese lado la Copa da muchas ventajas, pero los jugadores sufren las grandes distancias y eso también daña el espectáculo.
Entonces, estas ausencias ya mencionadas, sumadas a los de los jugadores que están lesionados como Juan Martín Del Potro, Jo-Wilfred Tsonga y Radek Stepanek, añaden a que a los grandes jugadores se les hace un poco incómodo competir por su país, y es que el calendario, que ya de por sí es pesado, se le suma viajar a Europa en vísperas de dos grandes torneos en América como Indian Wells y Miami.
Un caso en particular es España, que después de haber ganado varias Copa Davis en los últimos años, no jugará este curso en el Grupo Mundial y está esperando rival entre Rusia o Dinamarca, para llegar a disputar el pase al grupo de los mejores. Esto le sucedió a pesar de contar con exponentes como Rafael Nadal o David Ferrer, que renunciaron varias veces a jugar esta competición por la misma razón que hoy lo hacen Federer y Wawrinka. Esto mismo puede significar que el equipo suizo pueda perder su cupo en el grupo más apetecido por los países en el tenis, después de ganar su primera Copa Davis en la historia y que enfrenta dentro de unos días a Bélgica en Lieja.
Se ha visto en muchos casos que después de ganar esta Copa, deja de ser un objetivo para el país ganador al siguiente año, y eso perjudica al tenis en general no solo porque no compitan sus grandes estrellas sino porque siempre se espera que el defensor del título pueda revalidar de algún modo lo conseguido. Y eso no es así. En el tenis, salvo en contadas excepciones, no se puede pretender que un equipo sea campeón un año y al siguiente simplemente se conforme con permanecer en el Grupo Mundial porque sus estrellas no lo quieren jugar. Es un sistema flojo que no se debería, en mi opinión, jugar todos los años, de pronto así, cuando llegue, puede ser revalidada por el anterior campeón. Y también porque los jugadores descansarían de algún modo el no jugar estos partidos a cinco sets y sobre todo evitar los grandes viajes en la antesala de torneos tan importantes para ellos.
Hace unos años ya, Rafael Nadal había criticado el sistema y nadie en particular ha hecho mucho por cambiar el modo que hoy en día atrae al público de los distintos países, pero que deja a jugadores con muchos más partidos en el año, y con una sensación de que no son muy tenidos en cuenta a la hora de mejorar una competición que sin dudas es la más importante en el tenis.
¿Algún día la ITF se inventará algún sistema más atrayente para que todos los jugadores top estén siempre en la Copa? Es hora de empezar a pensar que beneficia más para seguir aumentando el interés en el deporte blanco, porque para todos los interesados en este deporte ese debe ser la premisa. Si están probando nuevos sistemas de puntajes como lo hicieron en Australia, ¿por qué no hacerlo para que esta Copa Davis atraiga aún más a los jugadores top y al público en general? Porque un Mundial no es lo mismo sin sus estrellas.
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