La rusa ganó su segunda corona del año y espera seguir en camino ascendente en la temporada.
Solo hay una única jugadora en la WTA que ha podido ganar más de un título y esa es Daria Kasatkina. La jugadora nacida en Tolyatti, que en 2018 supo irrumpir en el top 10 y se mostraba como un posible nombre en el recambio, llega en este 2021 con mejores sensaciones que en los últimos dos años, donde a pesar que jugó con mucha regularidad, los resultados la llevaron a retroceder hasta más allá de las 70 del mundo.
Ganar en el WTA 500 de San Petersburgo significa para la rusa regresar al top 40 y obtener triunfos le da la confianza de que puede jugar de igual a igual con las mejores. “Mi entrenador me dice que la mejor medicina es ganar partidos, y eso es 100 % verdadero”, comentó Daria luego de ganar el torneo, el segundo del año tras el Philip Trophy Island, en Australia.
“Estoy contenta de haber ganado otro torneo en la temporada. Tengo la sensación más maravillosa en este momento. Todo esto fortalece la confianza en mí misma”, agregó.
Sus victorias en la semana ante Clara Tauson, Aliaksandra Sasnovich, Victoria Kudermetova, Svetlana Kuznetsova y Margarita Gasparyan (en la final 6-3, 2-1 y retiro) tuvieron para Kasatkina algo en común: el manejo de la presión. “Estoy orgullosa de cómo fui capaz de manejarla. Me sentí diferente durante todo el torneo y realmente estoy orgullosa”, comentó.
Daria Kasatkina, quien es la primera rusa en conquistar San Petersburgo desde que es un torneo del WTA Tour (2016), ahora centrará sus objetivos en la temporada de arcilla, luego de decidir no jugar en el WTA 1000 de Miami.
Redacción: Fabián Valeth Orozco
