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Para nada es un secreto que los tenistas tienen que viajar grandes distancias y sobre todo en el circuito Challenger donde hay veces que los jugadores deben viajar de una punta del continente a otra en tan solo unas horas para enfrentar un nuevo torneo y con ello no solo seguir ganando puntos en el ranking, sino también dinero. Este fue el caso de Ryan Seggerman.
El estadounidense jugó ayer la final de dobles del Challenger de Szczecin, en Polonia pero este domingo tenía un nuevo compromiso en su carrera al debutar en la primera ronda de la calificación del Challenger de Sanit-Tropez, por lo que Seggerman debía recorrer aproximadamente 1300 kilómetros en menos de 24 hrs.
Seggerman tomó un vuelo a las 4:30am de la madrugada hacía Marsella, haciendo una breve escala en Berlín, para después tomar un tren hacía el punto más cercano a Sain-Tropez para después ser recogido por personal del torneo.
Pese a la gran odisea que tuvo que superar Seggerman logró llegar justo a tiempo a la cancha para su compromiso en el torneo francés, pero llegó tan justo que arribó a al cancha no solo con su raquetero, sino también con su equipaje de viaje. Todo esto no fue impedimento para que lograra acceder a la ronda final de la calificación al supera a Arthur Raymond por 7-6 y 6-1.
Esta no es la primera vez que el estadounidense pasa algo similar, pues en abril pasado por la mañana quedó campeón del Challenger de Ciudad de México y tomó un autobús, de aproximadamente de una hora de viaje, para llegar a disputar la primera ronda del Challenger de Morelos. Compromiso que también ganó.
This is legendary – Seggerman must have barely made it as he didn’t even have time to leave his suitcase😂 https://t.co/Uina8mJa5k pic.twitter.com/SbRThljLjh
— Damian Kust (@damiankust) September 15, 2024
