Para el tenista argentino, establecer los roles dentro y fuera de la cancha es fundamental.
En Match Tenis ya hemos reseñado varias de las historias que se producen en el tenis entre padres e hijos. Algunas son positivas y otras negativas, pero lo innegable es que muchas veces no existe un límite para los progenitores a la hora de distinguir entre la relación familiar y el vínculo deportivo.
Casos como el de Jelena Dokic y Guillermo Peréz Roldán son muestra de la influencia negativa que puede ejercer un padre en la carrera de su hijo. Pero existen ejemplos positivos, como el de Horacio Zeballos, quien puede hablar de la buena relación que ha construido con su papá.
Precisamente, el doblista argentino ha tomado la palabra para dar su opinión respecto al papel que la figura paterna debe representar en la vida de un tenista. «Con mi viejo siempre dejamos en claro los roles: era mi entrenador dentro de la cancha y mi papá afuera.», declaró «Cebolla» -como le llaman cariñosamente-, en declaraciones compartidas por la Asociación Argentina de Tenis.
Igualmente, el nacido en Mar del Plata profundiza en el deber ser de un padre a la hora de querer influir en la carrera de un hijo: «A los padres que saben de tenis les aconsejo que, si quieren involucrarse, lo hagan hablando con el entrenador«. Para concluir, el número cinco del ranking ATP en dobles, manifestó: «No es bueno que el chico reciba demasiada información«.
[author title=»Andrés Matallana Avella: » image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/666041598975852544/hSbddU6p_400x400.jpg»]Twitter @Andresf0724. Apasionado por el tenis. Disfruto del deporte blanco dentro y fuera de la cancha[/author]