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Pérez-Roldán y su padre: Historia de violencia y estafas

por Fabian Valeth
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Guillermo ha sacado a la luz después de mucho tiempo el maltrato que recibía de su padre.

Las historias de maltratos por parte de padres hacia sus hijos inundan los noticieros y las webs de todo el mundo. Lastimosamente, en el planeta tenis también se han presentado algunos casos, como el que contamos hace un par de meses, en donde Jelena Dokic denunciaba los múltiples abusos que había sufrido por parte de su progenitor, y que la afectaron de una manera muy fuerte. Esta vez, es un ex tenista argentino quien se atreve a contar una desgarradora historia de violencia intrafamiliar.

El nombre Guillermo Perez Roldán no dice mucho para los aficionados actuales del tenis. Él fue un tenista -ahora entrenador- argentino, que se destacó mucho en la etapa juvenil, llegando incluso a ganar su primer título ATP cuando recién tenía 17 años. A los 24 años se retiró, pero volvió intermitentemente a disputar algunos partidos en el circuito, del cual se apartó definitivamente en el 2006, a la edad de 37 años.

Hoy es noticia porque se ha atrevió a contar la historia del abuso y estafa que vivió por parte de su padre Raúl. Para entender todo, debemos tener presente que Raúl era el entrenador de Guillermo, y de hecho fue muy bueno ejerciendo este papel, puesto que le dio a su hijo las bases para poder construirse como un buen tenista, pero se olvidó o nunca supo cómo ser una figura paternal. “Guillo” lo describió muy bien de la siguiente manera, “creo que fue un visionario muy bueno, extraordinario en los detalles técnicos y un gran entrenador, pero lamentablemente yo fui su hijo. Hubiese preferido tener un peor entrenador y un mejor padre, simplemente eso“, afirmó el albiceleste según las declaraciones que reproduce el periodista argentino Sebastián Torok, para el diario La Nación.

Perez Roldán

Guillermo y Raúl Pérez-Roldán. Crédito/La Nación

Las situaciones más duras vinieron por la exigencia que este señor tenía frente a su hijo. “Si yo te contara realmente las cosas fuertes, como perder un partido, entrar en una habitación y que te peguen una piña en medio de la boca con el puño cerrado. Y yo las corría todas, eh. O que te metan la cabeza en un baño o que te agarren a cintazos arriba de una cama“, expresó el argentino para una entrevista que tenía un fin diferente (hablar de la vida actual de Guillermo) al que terminó tomando, según cuenta Torok.

Por si fuera poco, la crueldad de su padre también se vio reflejada en el tema económico, puesto que el dinero que Guillermo ganó hasta los 24 años, fue retirado por sus padres de la cuenta familiar en la que estaba. “Amarrocó toda la plata y me la sacó, sin avisarme nada. Eran cuentas familiares con tres firmas. Los cheques de ATP venían a mi nombre. Firmando dos, padre y madre, podían sacar la plata… Confiás en tu viejo. Yo no supe nunca más dónde estaba la plata“.

Terminé mi carrera y a los tres meses era pobre. No tenía ni coche. La estafa la descubrí en 1994. Así fue: llamé al banco de afuera, pedí una plata para irme de vacaciones y no había más. Y había varios millones de dólares. Además, teníamos casas, caballos de carrera, restaurante, departamento, etcétera. No cuento ni vivo con eso y sé que nunca la voy a tener”, relató el ganador de nueve títulos ATP.

  • El episodio que llevó todo al límite

En el año 1993, Guillermo estuvo con su padre en Génova, fueron a observar un partido de Mariano Zabaleta, y luego de ello, en el camino de regreso sucedió lo siguiente: “paramos en una estación de servicio y me fui a comprar algo para comer y me puse a hablar por teléfono. Cuando miro para afuera, dos tipos le estaban pegando a mi viejo. Salí, pegué dos tortazos (puñetazos), me puse hielo en la mano y seguimos“. Este hecho puede parecer aislado, pero no fue así, según explicó Pérez-Roldán, “al otro día cuando amanezco tenía la mano que parecía con elefantiasis. Después vine para Argentina, ya sabía que tenía algo roto, jugué todo el año infiltrado y muy pocos torneos. Después me operé varias veces y nunca quedé bien“.

Encima de estafado, la causa de mi retiro fue por defender a mi viejo, que como siempre, estaba haciendo quilombo (buscando problemas).

  • Su visión de las cosas y la relación entre ambos en la actualidad:

Guillermo tiene claro que su papá le hizo mucho daño, pero a pesar de eso le gustaría que fuera él mismo quien le explicara el porqué de su actuar. “Quisiera entender alguna vez, al menos tener una charla y saber: ¿Por qué siempre cagándome? Esa es la pregunta que me hago. ¿Qué satisfacción te da haberme cagado todo en la cara todos estos años?

¿Cómo es la relación de padre e hijo en este momento? “No tengo contacto de ninguna manera, lamentablemente ya no“, afirmó “Guillo”, quien además confiesa que uno de los motivos por los cuales se fue a trabajar a Italia durante algún tiempo, fue la eterna disputa con su padre.

Actualmente, Guillermo Pérez-Roldán vive en Chile y continúa trabajando como entrenador, aparte tiene dos hijas y está esperando un hijo más.

[author title=”Andrés Matallana Avella: ” image=”https://pbs.twimg.com/profile_images/666041598975852544/hSbddU6p_400x400.jpg”]Twitter @Andresf0724. Apasionado por el tenis. Disfruto del deporte blanco dentro y fuera de la cancha[/author]

 

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