Novak Djokovic continúa su camino hacia un hito histórico en su carrera al asegurar su lugar en la final del ATP 250 de Ginebra. El serbio superó al británico Cameron Norrie en una intensa semifinal que culminó con parciales de 6-4, 6-7(6), 6-1, demostrando su resiliencia y determinación en la cancha.
Este triunfo no solo representa una victoria más en su carrera, sino que lo posiciona a un paso de alcanzar su título número 100 en el circuito ATP, una hazaña lograda previamente solo por Roger Federer y Jimmy Connors. La última vez que Djokovic levantó un trofeo fue en los Juegos Olímpicos de París en agosto de 2024, por lo que esta final en Ginebra tiene un significado especial en su trayectoria.
En la final, Djokovic se enfrentará al polaco Hubert Hurkacz, quien venció al austriaco Sebastian Ofner con un marcador de 6-3, 6-4 en la otra semifinal. El historial entre Djokovic y Hurkacz favorece ampliamente al serbio, con siete victorias en igual número de encuentros previos, aunque nunca se han enfrentado en una final.
El torneo de Ginebra ha servido como una preparación crucial para Djokovic de cara a Roland Garros, especialmente después de un inicio de temporada en tierra batida con resultados irregulares. Tras caer en las primeras rondas de los torneos de Montecarlo y Madrid, y renunciar al torneo de Roma, el serbio ha encontrado en Ginebra el impulso necesario para retomar su mejor nivel.