Sin jugar, Novak Djokovic levantó el título 48° de su carrera y el séptimo de la temporada. La sensación nunca es la misma cuando no se gana en el campo. Sin embargo, título es título y el serbio debería sentir la tranquilidad de despedir el año con un nuevo cetro y más aún si tiene la satisfacción de terminar el curso como el número uno del mundo.
Foto: SI Tennis
Una Copa de Maestros deslucida para el planeta tenis vio como este domingo Novak Djokovic levantaba su cuarto campeonato en Londres tras el abandono de Roger Federer por problemas físicos en su espalda, esa que prácticamente devaluó su status en el circuito en el 2013. El oriundo de Belgrado a pesar de esa victoria no se sintió a gusto y así lo dejó ver en las declaraciones que hizo post-partido.
«No soy el tipo de jugador que celebra este tipo de triunfos, pero debo analizar toda la temporada. Este trofeo es la coronación de todos los logros de la temporada. Le debo eso a mi equipo y a todos los que me han apoyado en el camino», afirmó el reciente papá del circuito. Además añadió: «Nunca me gusta ganar así, especialmente en estos grandes partidos ante grandes rivales, con un retiro. Hoy en día no es fácil porque no jugué la final contra Roger».
‘Nole’ por tercer año en su carrera terminará la temporada como número uno del mundo (2011, 2012 y 2014), situación que lo deja en una posición inmejorable de cara al futuro y él lo sabe claramente. «En este momento estoy en la cúspide de mi carrera. Me siento físicamente muy en forma. Estoy muy motivado para seguir jugando en un nivel muy alto. Mientras sea así, yo voy a tratar de usar estos años para luchar por el No. 1 del mundo y por los grandes títulos en el deporte».
No obstante su sombra del deporte blanco pasa por un evento: la arcilla parisina de Roland Garros, esa que se plantea como su principal meta de ahora en más. «Roland Garros es y seguirá siendo uno de los mayores objetivos que tengo. Lo voy a seguir intentando». Dictó el serbio finalista en 2012 y 2014 en la ciudad luz.
Mientras tanto, para el tenista más laureado de Serbia llegan momentos de descanso, esos pocos que poseen los guerreros de las pistas. Ahora con Stefan, su hijo, estas ocasiones se vuelven una mina de oro. «Mirando hacia atrás en todo el año, ha sido más que impresionante para mí, en lo privado y profesional. Voy a tratar de tomarme un tiempo libre ahora con mi familia. Vamos a pensar en la próxima temporada después de las vacaciones».
