El griego criticó varias de las reglas que la ATP ha puesto a prueba en las NextGen Finals.
Por estos días, en Milán, se lleva a cabo la segunda edición de las NextGen ATP Finals, el novedoso torneo diseñado para menores de 21 años cuyo formato se asemeja al del Torneo de Maestros, puesto que ambos reúnen a los ocho mejores jugadores de la temporada.
Sin embargo, el certamen disputado en la capital italiana, a diferencia del que se juega en Londres, no reparte puntos para la clasificación mundial, lo cual le ha permitido al ente rector del circuito masculino poner a prueba una serie de modificaciones que, según la opinión de los propios protagonistas, no están siendo recibidas de la mejor manera.
El coaching durante los partidos, la cantidad de games necesarios para llevarse un set (4) y los nuevos toalleros son algunas de las novedades presentes en Milán que han causado molestia en jugadores como Stefanos Tsitsipas, quien manifestó su inconformidad con la propuesta luego de estrenarse con un triunfo ante Jaume Munar en la jornada del martes.
“Prefiero ser honesto y decir que no me gusta que haya coaching durante los partidos”, aseguró el griego, que se mostró a favor de mantener su ‘privacidad’ mientras esté jugando. “Somos nosotros quienes debemos encontrar las soluciones dentro de la cancha; por ejemplo, a mí me distrae mucho discutir sobre mi desempeño en medio de un partido”, expresó.
“Lo único que hará el coaching es generarle más estrés a los jugadores”
Tsitsipas, actual 15° del escalafón mundial, también criticó la decisión de ubicar toalleros a los costados de la cancha para que los recogepelotas no tengan que ser quienes cumplan esta función. “No me ha gustado en lo absoluto. Durante el partido estaba pensando constantemente dónde estaba mi toalla“. Y agregó: “Pienso que es muy útil poder disponer de las toallas en todo momento y no creo que sea un trabajo demasiado exigente para los recogepelotas”. A esta postura se sumó Frances Tiafoe: “Se pierde mucho tiempo”.
Pero el heleno y el estadounidense no fueros los únicos que expresaron su inconformidad con las nuevas normas. Andrey Rublev, otro de los vencedores durante la primera jornada, confesó: “No soy admirador de estas reglas“. El ruso aseguró que el recorte de games para ganar un set va en detrimento del espectáculo. “Se puede ganar partidos sin necesidad de jugar mejor que tu rival. Lo hemos visto en el partido de Tsitsipas contra Munar en el que un top 15 ha superado a un top 80 por apenas detalles, atravesando muchas dificultades”, comentó.
Redacción Match Tenis