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En un encuentro interrumpido por el cambio de cancha, Caroline Wozniacki salvó dos puntos de partido contra la joven promesa canadiense Leylah Fernández para avanzara la tercera ronda de Wimbledon con un marcador final de 6-2, 2-6 y 7-5.
El partido estuvo lleno de giros inesperados. En el patio exterior, el viento complicó las condiciones de juego, y el encuentro se paso a jugar en la cancha central con la incertidumbre sobre si se disputaría finalmente. Sin embargo, la tenista danesa mantuvo la concentración y luchó punto a punto hasta el final.
“Fue muy difícil hoy. En el patio exterior hacía viento. Luego oscureció. Luego nos dijeron que tal vez iríamos aquí. Quizás la cancha central. Quizás jugaríamos mañana. Al final del día traté de mantenerme concentrado. Pensé que ambos jugábamos a un alto nivel. Ella salió disparando. Creo que ganó los primeros 6 puntos o algo así. Seguí profundizando y encontré algunos buenos servicios. Creo que hoy tuve un poco de suerte”. comentó Wozniacki tras el partido.
Mientras el arbitro tomaba la decisión de continuar el juego, Caroline tuvo que agarrar su teléfono para llamar a la niñera que cuida sus dos hijos, resaltando que la danesa ya había intentado aplazar el juego por la falta de luz en la cancha exterior. Finalmente, la experiencia de Wozniacki, quien ha estado en Wimbledon durante varios años, fue clave en le momento de la victoria:
“Creo que definitivamente mi experiencia me ayudó en días como hoy. Siento menos presión. Me estoy divirtiendo, disfrutando el momento, puedo jugar en grandes canchas frente a esta increíble multitud. Simplemente me encanta. Realmente no doy nada por sentado”, admitió la tenista danesa.
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