El nuevo hogar del nacido en Belgrado está avaluado en unos 10 millones de euros.
Bien podría decirse que los tenistas son auténticos nómadas de la época en que vivimos. Desde que inician en el deporte blanco, sus rutinas consisten en viajar semana tras semana, hospedarse en cientos de hoteles y tomar innumerables vuelos hacia diferentes partes del mundo, primero, para adquirir el nivel necesario midiéndose ante rivales de otras latitudes; y cuando son profesionales, para cumplir con el exigente calendario.
Por eso resulta extraño hablar del lugar de residencia de un tenista, puesto que son pocas las semanas que allí pasan. Sin embargo, el contexto que marcó al 2020 los obligó a todos a refugiarse en sus hogares, incluido Novak Djokovic, quien pasó la cuarentena en una de las propiedades que ha adquirido más recientemente.
El actual N°1 del mundo decidió abandonar los lujos de Monte Carlo -donde vivía desde 2005- para mudarse a un lugar que nada tiene que envidiarle al paraíso monegasco: Marbella, en España.
Se trata de una mansión de nueve habitaciones con vista panorámica del mar y las montañas, en la que Nole y su familia han decidido asentarse desde este año. La impresionante villa es de estilo marroquí y, como era de esperarse, cuenta con un cancha de tenis privada, así como con gimnasio, spa, sala de juegos, sala de entretenimiento y sauna.
Según el medio británico The Sun, Djokovic también ha tomado la decisión de mudarse a España con la intención de compartir más tiempo junto a sus hermanos Marko y Djordje, quienes también viven en la zona.
Así luce el nuevo hogar de la familia Djokovic:
[author image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/1122365846247096320/gFoXr9nB_400x400.jpg» ]Marcelo Becerra Concha (@Marcelob11) Disfruto conociendo el mundo del deporte desde adentro. Bogotá.[/author]