Panoramas dispares vivieron dos de los máximos favoritos a quedarse con la corona en Shanghái. Novak Djokovic necesitó tres parciales (6-3, 4-6, 6-4) y esforzarse al límite para sobrepasar a Mikhail Kukushkin; mientras que Roger Federer no quiso pisar el abismo nuevamente y despachó con facilidad (6-4, 6-2) a Roberto Bautista-Agut.
Foto: Shanghai Rolex Masters
La jornada nocturna en el Masters de China tuvo como plato principal las presentaciones de Novak Djokovic, bicampeón reinante, y Roger Federer, finalista en 2010; dos de las cartas fuertes que el torneo aún conserva luego de los estragos que dejó el miércoles, donde la mitad de los top ten tomaron vuelo de partida de la ciudad asiática. Y ante eso, el serbio número 1 del mundo debió luchar contra una ‘desconocida’ corriente kazaja que se apoderó de la pista central, intentando lograr lo que casi nadie ha logrado en el último tiempo: derribar al de Belgrado en tierras orientales.
Jugando en muchas fases del partido de tú a tú, Kukushkin aprovechó que nunca se había enfrentado a Djokovic para mostrarle un juego anónimo y poco común en el vasto currículo del serbio. Con signos de incomodidad, el campeón de Wimbledon empezó a desenhebrar un pleito que quería extenderse en la primera manga y donde las chances de break eran escasas y limitadas. Apelando a su condición de jerarca del ranking mundial, consiguió aprovechar la única rotura de la que dispuso y cerró el set dejando claro sus ganas de acabar rápido.
Pero las cosas se complicaron para el campeón de las últimas dos ediciones de Shanghái. La intensidad en el golpeo de la pelota empezó a ser la constante del nacido en Volgogrado y el causante del desespero de Novak, que veía cómo su servicio era penetrado y su rival se montaba en el partido de manera severa. Aunque Kukushkin perdió su saque cuando intentaba ganar el parcial, con el servicio de su contrario logró apretar y poner en suspenso las tribunas del complejo deportivo. El partido estaba abierto y tenía una incógnita gigante, por primera vez en esta gira asiática peligraba la permanencia de Djokovic en un campeonato. Sin embargo, el nivel de ‘Nole’ aumentó para esquivar una posible derrota y con un sólo quiebre cerró el partido que lo envió directo a la acción del viernes. «Traté de prepararme de la mejor forma posible para este partido. Considerando que no lo había enfrentado nunca afectó un poco en el inicio del partido».
Con el recuerdo vivo del partido que pudo perder ante Leonardo Mayer en segunda ronda, Roger Federer salió decidido a no sufrir contratiempos contra el español Roberto Bautista-Agut y solamente cedió seis games para instalarse por tercera vez en los cuartos de final de Shanghái. Con el triunfo de hoy, el suizo alcanzó 58 victorias en el año y la décima en todas sus participaciones en este evento, además superó su actuación del pasado año y sumará puntos para el ranking del lunes, donde ya sabe que estará instalado en la 2da posición.
De principio a fin Roger Federer fue amo y señor del encuentro, se le vio más consistente con sus juegos de saques, que esta vez sólo concedieron una oportunidad de quiebre en todo el match. Aunque generó seis chances de break, el helvético sólo pudo quebrar en el décimo juego cuando Bautista-Agut intentaba darse vida en el set. El segundo fue un principio de monólogo para Roger, que quebró en el inicio y luego al final para tener la alegría de estar en la siguiente ronda. «Creo que en general le pegué mejor a la pelota. Estoy feliz por ganar en sets corridos hoy», analizó Federer al finalizar el partido.
Djokovic y Federer están programados a enfrentarse en las semifinales de Shanghái, pero antes de llegar a tan ansiado juego, deberán superar sus encuentros frente a Andy Murray y Julien Benneteau, respectivamente.
