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Las Next Gen Finals no solo son un evento para conocer y coronar a los grandes campeones del futuro en el tenis, sino que también es una plataforma que en la mayoría de los casos ha visto a sus campeones lograr grandes cosas al año siguiente de haberse hecho con el título,. Hoy Joao Fonseca se coronó campeón y con ello dar un paso en lo que será un muy exitoso futuro. Hagamos un repaso del progreso que han tenido campeones anteriores luego de su título en el torneo de fin de año.
Hyeon Chung fue el primer campeón en la historia de este certamen, en 2017. El tenista surcoreano apunta a ser una de las grandes estrellas de hoy y así lo mostró en 2018 donde consiguió algunos de sus mejores resultados, logrando terminar con el dominio de Novak Djokovic en Australia y llegando en Melbourne a sus primeras semifinales de Grand Slam. Además de haber llegado al menos a cuartos de final en nueve de los 16 torneos ATP que disputó aquella temporada, incluyendo eventos como Indian Wells y Miami. Lo que lo llevó a verse como el 19 del ranking tras haber iniciado el año por debajo del Top50.
El segundo campeón en la historia fue Stefanos Tsitsipas. El griego vio en el 2019 una de sus mejores temporadas al debutar en el Top10, alcanzó semifinales en dos Grand Slams, ganando tres de las seis finales que disputó en un año que cerró con broche de oro al coronarse en las ATP Finals. Fue aquel año que Tsitsipas consiguió uno de los dos triunfos que ha celebrado ante algún No.1 del mundo, venciendo a Novak Djokovic en el Masters 1000 de Shanghai.
Los años dos campeones siguientes no necesitan mayor presentación, pues Jannik Sinner se hizo con el título en 2019, por cuestiones de Pandemia el torneo no se llevó a cabo en 2020. Por lo que el cuarto campeón del certamen fue Carlos Alcaraz en 2021.
Sinner no pudo desplegar su tenis como hubiera querido en 2020 pero aquella temporada le sirvió para darse a conocer al mundo entero y dejar claro sus condiciones a futuro, puesto que ganó en Sofía su primer título ATP y alcanzó por primera vez los cuartos de final de un Grand Slam en Roland Garros. Con ello el italiano cerró el año dentro del Top 50 tras haber iniciado la temporada en el puesto 79.
Para 2022 Alcaraz firmó su temporada de consolidación al jugar uno de sus mejores años como profesional. Aquel año no solo conquistó siete títulos, sino que también se hizo con su primera corona de Grand Slam en Nueva York y con ello alcanzó la cima del ranking, para así marcar la mejor temporada que ha tenido un jugador al año siguiente de haberse coronado en las Next Gen Finals.
La buena racha que habían tenido hasta el momento los campeones tuvo un notorio bajón de rendimiento en años venideros, pues Brandon Nakashima que se coronó en 2022, al año siguiente no pudo mantener el gran año que firmó cuando alzó el título. Pues en 2023 su mejor resultado a nivel ATP fueron las semifinales en Lyon. Mientras que a nivel Challenger logró hacerse con un título, en Danderyd. Las lesiones y los malos resultados llevaron al estadounidense a caer por debajo de los 150 del mundo tras haber comenzado el año en el puesto 47.
Finalmente, la que podría ser la peor temporada que ha tenido un campeón de las Next Gen Finals se vio este año con Hamad Medjedovic. El serbio que había robado los reflectores en 2023 ganando cuatro títulos Challenger, además de hacer su debut en Grand Slams y cerrar el año ganando todos sus encuentros en las Next Gen Finals, para su mala fortuna no pudo mantener el impresionante nivel mostrado y en este 2024 cayó considerablemente en el ranking, por debajo del 160 del mundo, y cerrando el año con una final en el ATP de Belgrado para ilusionar con un buen regreso en 2025.
La próxima temporada será una prueba importante para Fonseca, pues si bien el haberse hchoe ste domingo con el fiftuo en Jeda es un gran paso a un prometedor futuro, ha quedado claro que no es garantía de nada y que en el futuro todo puede suceder. Aunque en esta ocasión su nivel da para pensar que en 2025 podría dar un certero golpe de autoridad y ganar algún título ATP y por qué no, firmar buenas actuaciones en Grand Slam. Solo el tiempo lo dirá.