En la previa de la final de Copa Davis que se jugará este fin de semana, hacemos un repaso de las nueve coronas que obtuvo Francia en su historia. Seis de ellas las consiguió antes de 1935, mientras que las tres restantes llegaron después de 1990.
Foto: Copa Davis
En la actualidad, Francia es el tercer país con más títulos en la Copa Davis, compartiendo esa posición junto a Gran Bretaña, con nueve coronas. Lejos está de la segunda colocación que ostenta Australia con 28 Ensaladeras de Plata. Sin embargo, los galos a lo largo de la historia de esta competición han sido catalogados como un equipo de respeto y tradición.
A pesar de contar con nueve coronas en sus vitrinas, Francia logró más de la mitad de ellas entre los años 1920 y 1930, es decir, hace más de 80 años, cuando las condiciones de la Copa eran completamente distintas a las que se viven hoy en día y el formato hacia que las naciones pudieran ganar el trofeo muchas veces consecutivas. Todo porque el campeón de una edición se reservaba el derecho de estar en la final del siguiente año.
La primera consagración de los franceses llega en 1927 con el equipo conformado por «Los Cuatro Mosqueteros», una insignia de la Copa Davis en aquellos tiempos. Jean Borotra, Jacques Brugnon, Henri Cochet y René Lacoste se consolidaron como uno de los mejores cuartetos del esa época y precisamente fueron los primeros en darle al país sus primeras finales en 1925 y 1926. A partir de 1927 y hasta 1932, los franceses se hicieron con todos los títulos en disputa alineando siempre a los «mosqueteros». Fueron los encargados de acabar con la hegemonía que tenían los estadounidenses (siete coronas consecutivas desde 1920 a 1926) e imponer la propia, que finalizaría en 1933 a manos de Gran Bretaña.
Durante esos seis años donde lo ganaron todo, los franceses vencieron en la final de Copa Davis al temido equipo norteamericano en cinco oportunidades y la restante fue ante los británicos. Además, una de esas series la ganaron oficiando de visitantes en Filadelfia, Estados Unidos.
Desde entonces, pasaron casi 50 años donde Francia nunca pisó la final, una muestra que dejaba ver la grandiosa época que marcaron «Los Cuatro Mosqueteros» y que nadie pudo igualar en esta nación. La próxima serie definitiva que alcanzaron los galos fue en 1982, cuando ya estaba instaurado el Grupo Mundial, y donde cayeron a manos de Estados Unidos (4-1) a pesar de haber jugado en condición de local.
La gloria volvió a sentirse en 1991, donde se tomaron revancha en Lyon del poderoso conjunto norteamericano liderado por Pete Sampras y Andre Agassi. Los encargados de llevar a cabo la gesta fueron Guy Forget y Henri Leconte. Cinco años después, Cedric Pioline, Arnaud Boestsch, Guy Forget y Guillaume Raoux lograron la hazaña de vencer de visitantes al equipo de Suecia encabezado por Stefan Edberg y Thomas Enqvist con un ajustado 3-2, lo que significaba el octavo trofeo en la historia.
Antes de que llegara el noveno trofeo, los franceses cayeron ante los australianos en 1999 en el decisivo, pero dos años después alcanzarían lo que es hasta hoy la última coronación en la Copa Davis. Jugando como visitantes en Melbourne, se tomaron revancha de los oceánicos en la final del 2001 con un equipo conformado por Nicolás Escude, Sebastien Grosjean, Cedric Pioline y Fabrice Santoro: vencieron en el quinto punto a los rivales que tenían en sus filas a Lleyton Hewitt y Patrick Rafter, sensaciones en ese entonces en el circuito masculino.
Desde entonces, Francia no sabe lo que es levantar una Ensaladera de Plata aunque dos veces estuvo ad portas de alcanzar la gloria: en 2002, cayendo sorpresivamente de local ante Rusia en París y donde les remontaron una ventaja de 2-1 y en 2010 ante Serbia, siendo derrotados por un rival que contaba en sus filas con Novak Djokovic, Janko Tipsarevic y Viktor Troicki, este último ganando el quinto punto decisivo. Francia esa vez volvió a dejar pasar una ventaja de 2-1.
Redacción MATCH TENIS
