Jannik Sinner, número uno del mundo, tuvo que emplearse a fondo más de lo previsto para superar al talentoso neerlandés Jesper De Jong por 6-4, 6-2 en el Masters 1000 de Roma, en un partido que se alargó más de lo esperado y puso en evidencia que el italiano aún no ha alcanzado su mejor versión en este torneo.
Aunque logró la victoria, Sinner mostró un nivel algo por debajo del que desplegó en su debut, dejando claro que necesitará mejorar considerablemente si quiere avanzar en el torneo. Su próximo rival será el argentino Francisco Cerúndolo, un jugador que ya sabe lo que es ganarle al italiano en esta misma pista.
“La última vez que jugué aquí, perdí contra él en este torneo. Es un jugador increíble. Está teniendo una temporada increíble. Hizo un gran torneo la semana anterior. Va a ser difícil”, declaró Sinner tras el encuentro, reconociendo tanto el nivel del argentino como el desafío que representa.
El italiano también aprovechó para reflexionar sobre su momento actual: “Tengo que subir mi nivel si quiero que esté igualado. Estos son exactamente los retos que necesito. Estoy intentando entender dónde está mi juego. Va a ser un buen reto y una buena prueba para mí. Ya veremos cómo va”.