El dos veces campeón llegó a 62 victorias en Flushing Meadows.
Preso de la agobiante humedad de Nueva York, una vez más, Novak Djokovic logró sobreponerse al extremo desgaste físico para sumar su segunda victoria en el último Grand Slam de la temporada. El de Belgrado despachó esta vez al local Tennys Sandgren con marcador de 6-1, 6-3, 6-7(2), 6-2, y se instaló en la tercera ronda del major norteamericano, al igual que en sus últimas 12 participaciones allí.
«Estuve muy bien en los dos primeros sets, pero luego perdí la concentración (…) No estoy muy contento por eso, pero afortunadamente pude retomar el control en el cuarto set», confesó. Y es que tras un comienzo bastante parejo en el que los dos primeros games tomaron trece minutos, ‘Nole’ se hizo con el control de las acciones y tan solo le concedió tres los catorce games posteriores a su rival para adueñarse de las dos primeras mangas. El set definitivo fue más parejo y, aunque el dos veces campeón contó con un match point, Sandgren tomó un poco de oxígeno para obligar a un cuarto set; sin embargo, Djokovic recobró la intensidad, quebró en el amanecer del último parcial y se terminó festejando su 35º triunfo de la temporada y el 62º en suelo neoyorquino.
«Las sesiones nocturnas son las más especiales de todo el circuito, sin duda», expresó el Nº6 del mundo, que aprovechó para bromear con el público «Gracias por hablar entre los puntos, durante los puntos… escuché un par de conversaciones interesantes«, contó entre risas, y después agregó: «Me encanta jugar aquí, este es el torneo más entretenido».
El próximo desafío para el serbio será avanzar a los octavos de final, pues, desde la primera que logró (2007), como mínimo, alcanzó las semifinales en Nueva York: 2007 (final), 2008 (semi) 2009 (semi), 2010 (final) 2011 (final), 2012 (final), 2013 (final), 2014 (semi) 2015 (final) y 2016 (final). Para eso deberá superar en su tercera presentación al francés Richard Gasquet, que derrotó 6-3, 7-6(5) y 6-3 a Laslo Djere.
Redacción Match Tenis
