Lo confieso, sí. Me he enamorado. Me he enamorado de la historia al revés. Del anacronismo. De la sinceridad de un corazón que late para seguir ganando. Que lo hace con más fuerza que nunca. Que quiere. Que puede. Que emociona.
Lo confieso, sí. He llorado. He llorado porque hay que ser de piedra para no haberlo hecho. Para no haber agarrado un pañuelo y secado, al compás con él, las gotas de agua bañadas en sentimiento. Para no haberse puesto de pie y aplaudirlo.
Lo confieso, sí. Soy creyente. Creo en la gente que se aferra a lo que le ilusiona. Que pelea hasta la extenuación. Que aparta a los que se ponen en medio para estorbar. Que sortea la crítica con hechos. Que limpia el camino para allanarlo y seguir adelante.
Lo confieso, sí. No he visto nada igual. No he visto a nadie igual en mi vida. No creo que lo vuelva a ver. Tampoco pienso que lo haya de su calaña. Es especial. Es único. Es indescriptible. Cuando lo tienes ante ti, una vez, te cambia la vida.
Lo confieso, sí. Estoy enfermo. Sufro de nostalgia. Nostalgia por pensar el día que no esté. Nostalgia por los 19 anteriores. Por si éste fuera el último de una lista de oro. Por si no hubiera más.
En Melbourne la foto es la que saca Rod Laver con su móvil. La cara de orgullo de Robert (el padre de Roger), las gafas semi empañadas de Lynette, (la madre), el aplaudo de Mirka (su esposa), ése último ‘gracias’ de Federer ante de entrar en cascada.
Hoy me confieso, sí. Solo espero que puedan guardarme el secreto.
[author image=»https://pbs.twimg.com/profile_images/803341748047147008/IDk8FirA.jpg» ]DAVID SÁNCHEZ: @DASanchez__. Periodista Freelance especializado en tenis. Voleador nato en la red 2.0 y un jugador regular desde fondo histórico. Ágil y con capacidad de adaptación a todo tipo de superficies textuales. Español pero cosmopolita gráfico. He publicado en medios como CNN Chile, Sphera Sports, SportYou o El HuffPost y colaborado con emisoras radiofónicas como Radio MARCA, es Radio, RNE o Radio Internacional.[/author]