El suizo y el austriaco se verán las caras por segunda vez bajo el marco de un Masters 1000.
Uno, viejo conocido del desierto californiano; el otro, debutante en finales de torneos Masters 1000 sobre canchas duras. Roger Federer y Dominic Thiem son los dos sobrevivientes de la última semana y media de competencia, y por eso se han ganado el derecho a combatir por el trofeo en Indian Wells, este domingo, a partir de las 5:30 pm, en Colombia.
Este será el quinto enfrentamiento entre el suizo y el austriaco en el historial general, el tercero sobre superficie dura y apenas el segundo correspondiente a torneos Masters 1000. La balanza está equilibrada con dos triunfos para cada uno; los tres primeros encuentros fueron disputados durante la temporada 2016 y los triunfos fueron para Federer en las semifinales de Brisbane, para Thiem por duplicado en octavos de final de Roma y semifinales de Stuttgart, respectivamente. El choque más reciente tuvo lugar en Londres, donde el helvético emparejó los mano a mano con un 6-2, 6-3 en la fase de round robin del Torneo de Maestros.
Pero los antecedentes poco importan en partidos de esta envergadura. Además, cada uno de los protagonistas tiene razones de peso para entregar lo mejor de sí en el campo central del Indian Wells Tennis Garden. Por ejemplo, Federer está a una victoria de ubicarse en soledad como el más veces campeón del certamen californiano; en estos momentos, el suizo comparte dicho estatus con Djokovic, ya que ambos ostentan cinco títulos.
Por su parte, Thiem quiere repetir lo hecho por Del Potro hace exactamente un año y darse el gusto de obtener su primera corona Masters 1000 superando al pentacampeón del torneo; el actual N°7 del mundo ha tenido dos oportunidades -ambas en Madrid- ante Alexander Zverev, pero siempre ha prevalecido el teutón. Además, sería una muestra contundente de la evolución que ha experimentado desde que trabaja bajo las órdenes de Nicolás Massú.
Federer arribó al partido cumbre sin haber concedido sets a lo largo de la semana; barrió en sets corridos a Gojowczyk, a Wawrinka, a Edmund y a Hurkacz, antes de salir beneficiado por el retiro de Nadal. Incluso, el oriundo de Basilea no necesitó de ningún tie break para imponerse y exhibió una altísima efectividad jugando con sus primeros saques.
El camino del austriaco de 25 años fue similar al de su rival, puesto que también avanzó una de sus rondas sin necesidad de jugar debido al retiro de Monfils por una molestia en su tendón de Aquiles. Ya no hay duda de su capacidad para jugar al máximo nivel en diferentes superficies. De hecho, el único capaz de arrebatarle un set en esta edición de Indian Wells fue Raonic en la semifinal. Thiem ha dado el salto de calidad en términos de juego y ahora quiere verlo representado en grandes títulos, pero Federer parece decidido a convertirse en el más ganador de la historia del desierto.
Redacción Match Tenis
